Gobernación usó 38% del presupuesto para mitigar desastres
A pesar del clamor de decenas de damnificados por el aluvión para recibir ayuda de emergencia en febrero, la Gobernación sólo gastó 724.088 bolivianos de 3,7 millones de bolivianos en la atención de desastres en 2018 en 30 de los 47 municipios del departamento que se vieron afectados por fenómenos naturales.
La ejecución corresponde al 38 por ciento del presupuesto, informó ayer el secretario de la Madre Tierra, Gonzalo Muñoz, en un informe a la Asamblea Legislativa Departamental. La convocatoria se hizo para conocer los recursos asignados y utilizados en declaratorias de emergencia los últimos cuatro años. Según el documento, en ninguna gestión se ejecutó la totalidad de los recursos.
En 2015, se asignaron 3 millones de bolivianos, de los cuales se gastaron 2,6, es decir, el 86 por ciento. La situación mejoró en 2016, año en el que se presupuestó la misma cantidad de dinero y se ejecutó 2,8 millones, el 90 por ciento.
Sin embargo, en 2017 los recursos llegaron a 4 millones de bolivianos, pero la ejecución sólo alcanzó los 2,6 millones, el 65 por ciento.
Pero, el hecho que más llamó la atención es el referente a la presente gestión. Se asignaron 3,2 millones de bolivianos y luego se adicionaron 500 mil bolivianos. Sin embargo, hasta la fecha sólo se ejecutaron 724.088 bolivianos, es decir, el 38 por ciento.
Según Muñoz, medio millón fue utilizado para la entrega de colchones, vituallas y tanques. Mientras, 2,5 millones serán ejecutados por la Secretaría de Obras en la construcción de disipadores en la cuenca Taquiña.
“Del medio millón que debíamos ejecutar en el marco de la emergencia se utilizaron 499.539, lo cual representa un 99 por ciento”, según Muñoz.
Por otro lado, agregó que su secretaría tiene 3 millones de bolivianos en recursos recurrentes de diferentes direcciones de cuencas y la unidad de riesgos, y están destinados para funcionamiento y proyectos de prevención.
Empero, el secretario admitió que por ahora en la cuenca Taquiña no se hace ningún trabajo. “Por las condiciones de inestabilidad y suelo no consolidado no es técnicamente responsable una intervención inmediata”, manifestó en su informe.
Muñoz también indicó que los taludes de Taquiña aún son inestables. “Un nuevo aluvión puede ser ocasionado de suscitarse precipitaciones intensas como las ocurridas en febrero”, agregó.
DECLARACIONES
"Tenemos proyectadas obras en el cauce del río Taquiña, pero para ejecutarlas es necesario que se resuelva el problema de la franja de seguridad. Nuestro trabajo está volcado en buscar la reconstrucción de la misma cuenca con todos los elementos de seguridad que permitan evitar otra desgracia". Gonzalo Muñoz. Secretario Madre Tierra de la Gobernación
"Lo que se ha visto es que la Gobernación no tiene capacidad para atender una emergencia. Cuando los pobladores piden apoyo, la Gobernación les dice que no hay recursos, pero la realidad es que no los están ejecutando. Se limitan a distribuir herramientas mínimas a los municipios”. Lizeth Beramendi. Asambleísta Departamental