Yuquis llegan a la plaza por Navidad junto a sus hijos y huérfanos
Mientras algunos pasean por los escaparates de las tiendas eligiendo un presente especial para la Navidad, la imagen de la plaza de armas expone la difícil existencia de los indígenas yuquis, afectados por la pobreza, las enfermedades y la indiferencia.
Lorena es una de esas indígenas que permanece desde hace una semana en la plaza poniendo a prueba la solidaridad de la gran ciudad. Se la puede encontrar sentada en una de las bancas frente a la acera del Concejo Municipal y la Gobernación junto a sus cuatro hermanos, seis sobrinos y cuatro hijos a la espera de una colaboración, sea cuál sea.
“Queremos algo para los niños. Siempre que llega Navidad están buscando un juguete para alegrar. Hay cochabambinos muy amables que sí nos colaboran; nosotros no tenemos nada, apenas la ropa que llevamos puesta”, contó.
Agua contaminada
Los indígenas yuquis llegaron hace una semana de la comunidad de Vía Recuaté, en Chimoré, para pedir a la Gobernación agua potable.
Según los comunarios, decenas de niños murieron por consumir el agua del río Chimoré. “En el río botan de todo, está contaminado y es el único lugar del que podemos consumir”, contó yuqui.
Pese a la crítica situación, aún no recibieron respuesta de la Gobernación. Por otro lado, las familias aprovechan diciembre para recibir ropa y víveres.
“Hay chicos huérfanos que están aquí, que no tienen familia, y nosotros andamos siempre en grupo, viendo en qué nos podemos ayudar, si a alguien le queda una prenda se la queda, sino se la pasamos a otra persona”, comentó una madre.
Las familias esperan la orden del cacique mayor para retornar a su pueblo natal.
“Ahorita somos como 300 familias del río Chimoré sufridas que hemos venido a reclamar agua potable. Los niños se están enfermando y, cuando vamos a las postas, no nos quieren atender, siempre discriminan a la gente sin recursos”, comentó una de las afectadas, mientras sostenía a su hijo de apenas un año de edad.
Al anochecer, las familias se acomodan cerca de las puertas de la Gobernación y, agrupadas, se acomodan en fila para dormir.
HAY PROBLEMAS CON LA PESCA Y AGRICULTURA
Las familias yuquis que llegaron a la ciudad relataron la pobreza que viven actualmente.
Según explicaron, los oficios de agricultura y pesca se han visto afectados por los constantes cambios climáticos en la zona del trópico cochabambino.
“Con la lluvia todo se está fregando, la yuca se está pudriendo en la tierra y la papaya se está oxidando arriba en los árboles estando verdes y el plátano tarda en crecer”, comentó una comunaria.
Ante la falta de recursos, los comunarios se trasladan constantemente para recibir colaboraciones. Algunos relataron que sufren discriminación en diversos sitios y que requieren de atención médica para sus familiares en su comunidad.
“Necesitamos sobre todo lo que son los alimentos y medicamentos para nuestros hijos, cuando están con alguna infección por tomar agua del río y nadie quiere atenderlos por ser gente pobre”, dijo una de las afectadas.