El “grooming”, un ciberdelito que apunta a captar niñas y adolescentes
Rocío Corrales
Beatriz (nombre ficticio) de 14 años camina por los alrededores del estadio Félix Capriles, en la zona norte de la ciudad, esperando a su primer cliente. Había aceptado su primer trabajo por medio de un contacto en Facebook, no conocía a su empleador, pero sabía que el trabajo consistía en tener citas. No se imaginó que su contacto de las redes sociales, que la convenció de aceptar el ofrecimiento, era un hombre adulto y, peor aún, su captor y violador.
Él agarró a la menor, la llevó a un motel y la abusó sexualmente. Beatriz hizo la denuncia acompañada de sus hermanos porque fue amenazada y extorsionada. “Fue difícil para ella hacer la denuncia, sus padres no creyeron en sus versiones”, relató el responsable de División de Delitos Cibernéticos Informáticos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Cochabamba, Alex Martín Suntura.
El experto en redes sociales Marcelo Durán explicó que los adultos que acosan a un niño o adolescente a través de las nuevas tecnologías para propiciar un abuso sexual son llamados “groomers”. Se hacen pasar por menores para poder ganarse su confianza y lograr que le envíen fotos o videos comprometedores para luego chantajearlos.
Todo comienza como una conversación casual por las redes sociales y puede terminar en delitos de pornografía, violencia sexual y trata y tráfico de personas. Desde octubre de 2018 hasta la fecha, la División de Delitos Cibernéticos Informáticos, en colaboración con la División de Trata y Tráfico de Personas, registró cuatro casos de “grooming” en Cochabamba con víctimas de 10, 14 y 16 años.
El último caso, el de Beatriz, fue hace tres semanas. “Se hizo seguimiento al perfil donde la capturaron. El operativo logró contactar al captor (…). La víctima desde una distancia llegó a reconocer a su agresor y se procedió con la aprehensión”, relató Suntura.
El acusado, de 30 años aproximadamente, tenía una denuncia por el mismo delito a una menor de 10 años.
Asimismo, la directora de la División de Trata y Tráfico de Personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de La Paz, Gabriela Coca, recalcó que actualmente los delincuentes crean perfiles falsos, toman contacto con sus víctimas, crean una relación de confianza y amistad para posteriormente intercambiar imágenes con contenido sexual.
Medidas de prevención
Durán advirtió que para evitar el “grooming” debe inculcarse en los niños y adolescentes el uso responsable y supervisado de la tecnología. “La clave está en los mismos chicos, o en el colegio, en ese sentido el colegio debería hacer talleres permanentes”, aseguró. “Se tiene que hablar de ‘grooming’ todos los días en el colegio para que se pueda reconocer un perfil falso, qué hacer si un desconocido te habla, qué medidas tomar, cómo reaccionar, cómo denunciar”, añadió .
Durán propone que las empresas de telefonía, el Ministerio de Educación y las fundaciones que trabajan en la promoción de seguridad creen un programa de concientización permanente en las unidades educativas.
Alertas
Identificar indicios de “grooming” es complicado. La mayoría de los acosos cibernéticos comienza con relaciones de amistad con el “groomer”, con conversaciones amistosas, comentarios afectuosos y piropos. Las víctimas no advierten el peligro.
“La víctima nunca se siente víctima, se siente cómoda, los padres no podrán identificar el ‘grooming’ de un día para el otro, probablemente muy tarde”, sostuvo.
4 casos en Cochabamba
La Policía cibernética desde el año pasado atendió cuatro casos de “grooming”.
OPINIONES
"Nosotros trabajamos con evidencia digital, hay otro tipo de tratamiento de esta información.
Gabriela Coca
Directora de la División de Trata y Tráfico- Felcc de La Paz
"La clave está en los mismos chicos, o en el colegio, en ese sentido el colegio debería hacer talleres permanentes.
Marcelo Durán
Experto en redes sociales