Fondos de Urkupiña irán a salud y mantenimiento
La Alcaldía de Quillacollo prevé invertir los fondos de la organización y promoción de la festividad de Virgen de Urkupiña 2020 en la adquisición de equipos de bioseguridad y en la refacción del templo San Ildefonso, luego de confirmarse la suspensión de la fiesta por la emergencia sanitaria que vive el país por la pandemia del coronavirus.
“El presupuesto está allí, no se lo tocó para nada aún, hay que hacer los traspasos para invertir en salud e infraestructura de la iglesia”, adelantó el alcalde suplente, Héctor Montaño (FPV). El monto a gastar es aproximadamente un millón de bolivianos.
Ayer, representantes del Comité Interinstitucional anunciaron que este año quedan suspendidas todas las actividades culturales y sociales de la festividad para evitar la proliferación del virus. Mientras que las misas del 15 y 16 de agosto se trasmitirán por Internet, radio y canales de televisión para llegar a miles de feligreses con mensajes que permitan fortalecer y renovar la fe.
La determinación fue consensuada en un encuentro entre la Iglesia católica, Gobernación, Alcaldía de Quillacollo y la Asociación de Fraternidades Folklóricas Virgen de Urkupiña (AFFVU).
El director de Culturas del municipio, Pablo Hinojosa, mencionó que en próximas semanas buscarán reunirse con prestadores de servicios turísticos, artesanos, hoteleros y con el sector gastronómico para ver alternativas que permitan aliviar una parte de las pérdidas económicas que sufrirán por la crisis sanitaria.
“Quizá podemos analizar el tema impositivo. Sabemos que todos necesitan trabajar, pero el riesgo es demasiado”, puntualizó.