Devotos agradecen a Urkupiña por fortaleza contra la Covid-19
Decenas de devotos comenzaron a llegar ayer al templo San Ildefonso y al cerro de Cota para encomendar su salud y agradecer por la fortaleza que tuvieron para vencer la batalla contra la Covid-19.
Varios feligreses indicaron que la pandemia les ayudó a renovar su fe, por lo que a pesar de las restricciones se trasladaron a Quillacollo con velas, flores y otros obsequios para venerar a la Patrona de la Integración Nacional.
Este es el caso de Eufronio Meruvia, un devoto que llegó junto a su esposa y sus dos hijos para agradecer a la “mamita” por la fortaleza que recibió para vencer la enfermedad.
“Estoy aquí para agradecerle, cuando me enfermé me encomendé a la virgencita. He estado 21 días con oxígeno y sobreviví. Son 27 años que vengo en familia con mucha devoción a pedirle salud y otros deseos”, contó.
Meruvia afirmó que cada año se traslada desde el kilómetro 9 de la doble vía de La Guardia de la ciudad de Santa Cruz hasta Quillacollo, en Cochabamba, para participar de la celebración de la fiesta.
“El año pasado no pude venir, había más restricciones, por eso ahora llegué, me voy a quedar como dos días”, acotó.
Don Eufronio aseguró que entre las tradiciones que practica para agradecer a la Virgen de Urkupiña está el asistir a las misas y sacar piedras de las canteras del cerro de Cota, en el Calvario.
En tanto, otra devota que arribó desde la ciudad La Paz mencionó que por gratitud trajo algunos arreglos florales y velas.
“La Virgen ha protegido a mi familia, ninguno se enfermó y sé que lo va a seguir haciendo. Vine también a rogar para que esta enfermedad se vaya pronto”, recalcó.
En tanto, el alcalde de Quillacollo, Héctor Cartagena, pidió unidad y fuerza para trabajar por el desarrollo del municipio.
Pese a que por segundo año consecutivo se suspendieron las actividades centrales presenciales de la festividad, los peregrinos acudieron de forma masiva a escuchar las misas y hacerse bendecir.
Los feligreses usan barbijos, trajes de bioseguridad y algunos alcohol en gel en para evitar contagios. Sin embargo, pese al esfuerzo que hicieron algunos policías y personal de la parroquia la gente se aglomeró.
El intendente municipal, Enrique Quintanilla, anunció que este fin de semana se intensificarán los controles para que se cumpla con el aforo de 100 personas y se limitará el tiempo de sus visitas.