Opciones y consejos para pasar las vacaciones escolares en pandemia
Llegan las vacaciones de verano en Bolivia y con ellas, la preocupación de los padres por conseguir que sus hijos inviertan de forma adecuada este tiempo libre. Existen diversidad de talleres, cursos y actividades vacacionales; elegir entre tanta oferta no es tarea fácil, más en el contexto actual en el que la pandemia cambiado la forma en que se vive este periodo.
La psicóloga infantil Elizabeth Reque y Mónica Olmos, quien posee una maestría y un doctorado en educación, brindan algunas pautas para que los niños y adolescentes saquen provecho de este periodo sin tareas escolares.
“Las actividades que los jóvenes y también los niños puedan asumir esta vacación tienen que ser bajo la perspectiva de su bioseguridad”, explica Olmos.
Ambas expertas recomiendan extremar medidas de bioseguridad si los niños salen al aire libre para cualquier tipo de curso o taller.
Sólo en el primer semestre del año, Cochabamba reportó 1.003 niños y adolescentes de entre 5 y 13 años atacados por la Covid-19.
Además, para la psicóloga Reque, las actividades que deben primar después de dos años de clases virtuales deben ser aquellas que desarrollen el hemisferio derecho del cerebro, que es el encargado de la creatividad. El deporte, música, baile, pintura y arte en general son las áreas más recomendadas.
“Sobre todo, que no sean estructuradas, sino que le permitan al niño realmente descansar”, afirma.
Sin embargo, los más jóvenes de la casa no siempre están dispuestos a invertir su tiempo en otra cosa que no sea disfrutar de las vacaciones.
En esos casos, Olmos indica que “la decisión la toma la familia del menor junto a él. No impongamos. Conversemos y vamos a encontrar con seguridad la actividad más adecuada y pertinente para el niño o joven”.
En este aspecto, las expertas también apoyan la idea de que no se los fuerce a realizar ningún curso, sino más bien dejarlos “aburrirse” para que a partir de la inactividad desarrollen la forma de buscar algo que los motive.
Tras un periodo escolar marcado por las reuniones virtuales, recomiendan que en estos meses se desconecten de las pantallas y se alejen de los teclados. Salvo excepciones.
“Si los padres notan que la conducta no se ha alterado y que los chicos están felices de hacer algo diferente pero aún así de manera virtual, pues yo no veo por qué no puedan hacerlo”, sugiere la experta en educación.
Ofertas
Ante la posibilidad de que los niños puedan salir de casa, siempre con medidas de bioseguridad, en redes sociales han proliferado las ofertas de cursos vacacionales. Hay cursos de manualidades, actuación, danza y pintura, además de apoyo escolar, con costos que van de 100 a 350 bolivianos.
Además, se ofertan cursos de desarrollo de aplicaciones, juegos y creación de programas dirigido a niños desde los 5 años, con precios desde 100 bolivianos.
Algunos cursos incluyen el material. También hay ofertas de “combos” de varios cursos por el precio de uno.
Impactos
El cierre de colegios, la pandemia y la enseñanza virtual han sido determinantes para la educación y salud mental de los estudiantes.
Ansiedad infantil, depresión nerviosa y bulimia o anorexia son algunos de los trastornos que se han incrementado durante la pandemia entre sus pacientes, según la psicóloga Reque.
“Les recomiendo cuidar la salud mental de sus hijos y dedicarles tiempo”, recalca ante la problemática.
Ambas expertas reconocen a los padres como un pilar fundamental para frenar el impacto de la pandemia en el desarrollo de los menores.
No existen estudios sobre salud mental de niños y adolescentes en Cochabamba.
En cuanto a educación, de acuerdo a estudios de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), aproximadamente 20 millones de niños y niñas en preprimaria se vieron afectados por el cierre de escuelas en América Latina y el Caribe y más de otros 100 millones de niños no alcanzarán el nivel mínimo en lectura, como consecuencia de la crisis sanitaria mundial.
En Bolivia no hay cifras oficiales sobre deserción escolar durante la pandemia, pero la Federación de Maestros Urbanos y la de Rurales estiman que podría alcanzar 30 por ciento o 40 por ciento de menores que habrían abandonado el colegio.
Presencialidad
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la vacunación de menores de edad es fundamental para evitar que la educación de los niños, niñas y adolescentes se vea afectada, así como su salud emocional.
En Bolivia, desde el pasado 9 de diciembre los niños entre 5 y 12 años pueden recibir la vacuna contra la Covid-19. El objetivo de esta medida es asegurar que las clases vuelvan a ser presenciales el próximo año.
Hasta el 14 de diciembre, más de 24.756 niños han recibido la vacuna Sinopharm, lo que equivale a un porcentaje del 1,5 por ciento de la población infantil
El Ministerio de Educación determinó que las clases para 2022 mantendrán las tres modalidades (presencial, semipresencial y virtual) que se utilizaron en la gestión que termina. Dependiendo del comportamiento de la pandemia, se decidirá cuál se aplicará en las unidades educativas.
Expertos sugieren actividades al aire libre para niños, niñas y adolescentes, tras dos años de encierro por la pandemia
AMÉRICA LATINA
Efectos de la pandemia
El 15 por ciento de los niños, niñas y adolescentes de entre 10 a 19 años viven con un trastorno mental diagnosticado.
El 27 por ciento jóvenes sintió ansiedad durante la pandemia.
La ansiedad y depresión representan la mitad de trastornos mentales en jóvenes de la región.
La pandemia también está afectando a la salud mental de los niños y está llevando a las familias a la pobreza, según la Unicef.
Las ofertas de cursos en esta vacación van desde desarrollo de aplicaciones, baile, artes, deportes, música y refuerzo escolar.