Llegan los vagones para la línea amarilla del tren metropolitano
El ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, entregó ayer cuatro trenes para la línea amarilla. Estos llegaron a Cochabamba tras largas gestiones en Bielorrusia. Los mismos serán resguardados hasta completar las obras de este trazo paralizado por la oposición de vecinos y activistas ambientales.
“Hemos recuperado cinco trenes, cada uno con tres vagones. Estos trenes los dejaron en Bielorrusia, nosotros inyectamos recursos económicos por más de 200 millones de bolivianos y es así que los tenemos en Cochabamba para complementar la línea amarilla”, informó. El último tren llegará el 21 de febrero.
El coordinador general de la Unidad Técnica de Ferrocarriles (UTF), Augusto Chassagnez, lamentó la oposición a la ejecución de la línea amarilla que debe llegar hasta la zona de El Castillo, en Sacaba, bordeando el río Rocha.
“Será el pueblo cochabambino quien decida si construimos en este momento o lo postergamos, y asignamos estos recursos a otras líneas planificadas y estudiadas”, sostuvo. Entre las otras líneas previstas están la vía a Tiquipaya, a la Angostura y un ramal a la laguna Alalay, indicó Montaño.
Recorrido
La línea verde es de 27 kilómetros, desde la estación central de San Antonio hasta Suticollo, en Sipe Sipe. Se encuentra en etapa de socialización hasta Quillacollo y se prevé conocer las tarifas la próxima semana.
Alrededor de 27 mil personas ya usaron esta línea, informó el director Ejecutivo de la Operadora Mi Tren, Roger Uribe. La línea roja, hacia la zona sur, funciona con un costo de Bs 3,50. El tren se construye desde 2017.