Sabsa dispuesta a subir monto de inversión
La administración de Servicios de Aeropuertos Bolivianos (Sabsa) está dispuesta a incrementar su plan de inversiones a más de 36,3 millones de dólares para modernizar los servicios e infraestructura de las terminales aéreas del eje central del país, según su gerente general, Anthony Alicastro.
Alicastro dijo a este medio que hace tres meses se suspendieron las negociaciones con las que Sabsa buscaba introducir una adenda al contrato de concesión firmado con el Gobierno, especificando los proyectos y montos de inversión para los próximos nueve años.
El gerente general de Sabsa sostuvo que la empresa, entre 1997 y 2012, entregó a la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea de Bolivia (Aasana) 73 millones de dólares por tasa de concesión (alquiler).
En caso de concertarse un nuevo plan de inversiones, anunció que a la conclusión del contrato de concesión Aasana recibirá alrededor de 96 millones de dólares adicionales por tasa de concesión, siempre y cuando se modifiquen las tarifas aeroportuarias.
“Por las consideraciones señaladas, estamos abiertos a seguir dialogando y ver cómo se podría mejorar ese monto de inversión (36,3 millones de dólares)”, sostuvo. Lamentó que el diálogo con el Gobierno se haya roto, a pesar de “numerosos pedidos por escrito y telefónicos de parte mía hacia al Ministro de Obras Públicas para terminar lo que faltaba, suscribir una adenda”.
Reconoció que en los últimos siete años hubo una sequía de inversiones, debido a que la ex Superintendencia de Transportes y Comunicaciones, ahora Autoridad de Transportes y Telecomunicaciones (ATT), “bajó ilegalmente las tarifas en 5 por ciento el año 2005”, al extremo de generar un desfinanciamiento del contrato de concesión y dejar a Sabsa en la imposibilidad de realizar todas las obras que tenían previsto ejecutar.
Por su parte, el secretario general del Sindicato Sabsa Cochabamba, Boris Terceros, denunció que la falta de inversión “está poniendo en riesgo todas las operaciones aéreas nacionales e internacionales, debido a que no se renovaron los cuatro carros bomberos que vienen de los años 70, no se recarpetaron las dos principales pistas; no se instalaron las mangas de abordaje y no existen repuestos ni equipos necesarios para garantizar seguridad y operabilidad de las aeronaves”.
Los Tiempos verificó el deterioro de los vehículos de intervención rápida y el bacheo simple de puntos estratégicos de las dos principales pistas.
Alicastro dijo que el plan de inversiones, rechazado por el Gobierno por considerarlo insuficiente, contemplaba ejecutar proyectos como las mangas de abordaje en Cochabamba, el recarpetado asfáltico y ampliación en La Paz y el mejoramiento del aeropuerto de Santa Cruz.
Sin embargo, señaló que “así como están las cosas, los tres aeropuertos (que opera Sabsa) son operables y seguros; pero es evidente que se requiere renovación, equipamiento y ampliaciones en una nueva etapa de inversiones”.
Por otra parte, ante los insistentes rumores de nacionalización de Sabsa, Terceros contradijo al ejecutivo sindical de El Alto, Alfredo Chávez, quien dijo el miércoles pasado que había apoyo unánime de los trabajadores de base a esa medida, y reiteró que los trabajadores del sindicato Cochabamba en ningún momento exigieron la expropiación de la empresa, puesto que le corresponde al Gobierno definir su futura administración. Añadió que lo que ellos piden es el cumplimiento del contrato de concesión, como la mejor demanda para garantizar seguridad y operabilidad en los aeropuertos.
El miércoles pasado, Álvarez declaró que unos cuantos “protegidos” de la empresa, que ganan entre 15 y 20 mil bolivianos, son los que se oponen a la nacionalización de Sabsa, pero que los trabajadores de base están de acuerdo con esa medida.