Analistas: Las cifras oficiales alteradas ponen en riesgo la planificación del país
Las instituciones de estadística de los países de la región atraviesan por una situación crítica de falta de independencia política, lo que deriva en la alteración de cifras macroeconómicas. Sin embargo, estos hechos no pueden ocultarse por más de tres a cuatro años, hasta que los organismos internacionales lo detecten, según especialistas.
Recientemente, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), publicó un informe que desmiente muchas de las afirmaciones que se hicieron en materia de pobreza durante la era kirchnerista, cuando se dejó de medir la indigencia de manera oficial, en el año 2013.
El documento, titulado “Medición de la pobreza por ingresos”, sostiene que “el uso de las cifras oficiales de inflación condujo a una subestimación de la pobreza” en Argentina.
Ante este hecho, el analista económico, José Gabriel Espinoza, indicó que los organismos internacionales como la Cepal parten de dos criterios al recibir información: la “buena fe” de las instituciones de estadística y la independencia política.
Sin embargo, añade que actualmente, los institutos de estadística dependen cada vez más políticamente de los Gobiernos, poniendo en riesgo la planificación de políticas en favor de la población.
“En este sentido, el principal problema que se encuentra no es tanto la metodología que se utiliza, porque es una metodología estandarizada sino, la falta de independencia política de los institutos de estadística”, afirmó.
Según el analista económico Pablo Cuba, la manipulación de las cifras macroeconómicas no puede ocultarse por más de tres a cuatro años porque actúan en un efecto dominó para otros datos, haciendo visible la irregularidad.
Por su parte, el analista económico Gonzalo Chávez lamenta que el Gobierno ponga a su favor las cifras de los organismos internacionales, como si no supiera que las estimaciones se basan en los datos oficiales que el Instituto Nacional de Estadística (INE) les proporciona.
“Una hipérbole propagandística del Gobierno gira en torno del crecimiento del PIB que estaría certificado por organismos como Cepal y FMI. Cabe aclarar que el generador primario de datos es el INE”, argumentó.
Espinoza explica que si se manipula una variable económica, actúa como una cadena de elementos. “En la medida que vas tocando eslabones, pues la manipulación en más visible, porque son problemas estadísticos que se arrastran”, dijo.
Para este año, la Cepal prevé un crecimiento del 4,3 por ciento para Bolivia en 2019, superior a lo previsto por el Fondo Monetario Internacional que proyectó un 3,8 por ciento. El Gobierno planificó un 4,7 por ciento para esta gestión.
Todos los datos que generan organismos internacionales están en función a datos oficiales de los Gobiernos
EMPRESARIOS OBSERVARON AL INE
La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) puso en tela de juicio las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre los datos del Producto Interno Bruto (PIB) del cuarto trimestre de 2017 y el primer trimestre de 2018.
Las observaciones se hicieron respaldadas en datos históricos y argumentando que existe un compromiso político de por medio para el pago del segundo aguinaldo
Un día después, el Instituto INE ratificó los datos del Producto Interno Bruto (PIB) y calificó de “irresponsable” a la institución que aglutina a las empresas del sector privado.