INE reconoce el gran efecto de hidrocarburos en el PIB
El Instituto Nacional de Estadística (INE) reconoció el gran efecto que tiene la exportación del gas y los hidrocarburos en el crecimiento del Producto Interno Bruto del país, mientras que analistas consultados por este medio deploraron la dependencia que la economía nacional tiene de esta materia prima.
Ante la pregunta realizada por este medio de por qué se había reportado un crecimiento de 4,61 por ciento en octubre de 2018 (para el pago del segundo aguinaldo) y en el balance anual (de enero a diciembre) sólo se reportaba 4,22 por ciento, el INE respondió por escrito a este medio: “En el segundo semestre de 2018, las condiciones externas de nuestros principales socios comerciales, en este caso Brasil y Argentina, se deterioraron, ocasionando que la demanda de gas natural se reduzca, afectando por consiguiente a la producción del sector y el PIB en general, aspecto que se observa claramente en la tasa de crecimiento negativa del sector de hidrocarburos”.
Según el informe del PIB presentado el miércoles pasado, el sector de hidrocarburos tuvo un decrecimiento de 7,82 por ciento, el rubro que más descendió, mientras que, del otro lado, la agropecuaria es el rubro que más creció, con 6,91 por ciento.
“Los sectores intensivos en mano de obra (no extractivos) que dependen de la demanda interna presentaron un crecimiento sostenido en 2018; mientras que los extractivos, que obedecen mayormente al desempeño del sector externo, tuvieron un comportamiento a la baja en los últimos años, producto de la menor demanda por parte de nuestros principales socios comerciales. Los datos muestran que la estabilidad y el crecimiento de la economía boliviana se explican, principalmente, por el dinamismo del mercado interno”, explica el INE.
El director del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, y el economista Gabriel Espinoza coincidieron en calificar esta dependencia de los hidrocarburos de altamente peligrosa, más aún considerando que se agotan las reservas y no hay inversiones en exploración. “Llama mucho la atención que sean agricultura y administración pública los rubros que impulsen el PIB”, dijo Espinoza.
El economista lamentó que el rubro de hidrocarburos haya bajado en casi ocho puntos cuando los precios internacionales en 2018 fueron más altos que un año antes. “Quiere decir que lo que bajaron fueron los volúmenes de envío.
“Ya es innegable que muchos pozos que alimentan los contratos de Argentina y Brasil están en fase de decadencia”, dijo a tiempo de advertir que algo parecido ocurre con los minerales, donde tampoco hay exploración.
Para Rodríguez, en tanto, hay dos lecciones que enseñan los datos: primero, si el sector de hidrocarburos hubiera tenido un buen desempeño, probablemente la economía hubiera crecido más, pero la demanda de Brasil y Argentina bajó. “No es conveniente depender de sectores extractivos, peor si son de recursos no renovables”, dijo.
La segunda lección, según Rodríguez, es que en 2018 el país creció gracias al sector agropecuario y al manufacturero, que demandan gran cantidad de mano de obra. “Hay sectores que merecen la atención. Yo creo que es hora de prestarle más atención al sector no tradicional, a las exportaciones no tradicionales”, dijo.
