Cochabamba, entre los departamentos de mayor pobreza multidimensional
Cochabamba se encuentra en el segundo grupo de departamentos que registran mayores índices de pobreza multidimensional del país, con cifras por encima del promedio nacional. En cuanto a incidencia, el 58,7 por ciento de la población cochabambina es afectada por este tipo de pobreza.
La información está contenida en la investigación “Desigualdades y pobreza en Bolivia, una perspectiva multidimensional”, presentada ayer por el Centro de Estudios de Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla). Según el estudio, el país registra un promedio nacional de 29,7 de Índice de Pobreza Multidimensional (IPM).
Cochabamba se halla agrupada con La Paz y Oruro, entre los departamentos que registran entre 32 y 34 IPM. Sólo Potosí y Beni presentan mayores indicadores de este tipo de pobreza: entre 34,2 y 36,2.
En el otro extremo, están Santa Cruz, Pando y Tarija (“los menos pobres”) con promedios entre 25,6 y 27,7.
La investigación del Cedla, como lo expusieron cinco expertos en un acto de presentación, se caracteriza por medir la pobreza no sólo desde el punto de vista de ingresos económicos, sino también desde otras dimensiones (de donde viene su nombre): recursos monetarios, oportunidad (salud, educación, acceso y calidad de trabajo, vivienda y medio ambiente), poder y voz (participación política y seguridad humana (alimentaria y de la personas).
La investigadora del Cedla Silvia Escóbar explicó a Los Tiempos que la región en la que está agrupada Cochabamba, junto con La Paz y Oruro, se caracteriza, justamente, por albergar una población con muy bajos ingresos, por debajo del costo de una canasta básica familiar; escasos recursos complementarios al trabajo; poca dotación de bienes que podrían ser utilizados de manera productiva, niveles educativos bajos, poco acceso a la salud, empleos en condiciones precarias, viviendas sin servicios básicos y con baja seguridad humana, que inciden en la calidad del trabajo.
Los investigadores, a su turno, coincidieron en que se deben buscar políticas que apunten a solucionar estos aspectos, además de buscar mayor igualdad y redistribución, y no restringirse a transferencias monetarias.
Con relación a las críticas del Gobierno en sentido de que no es una investigación “seria”, Escóbar contestó que es una metodología que ya viene siendo aplicada desde hace muchos años por distintos países del mundo y de América Latina, y por los institutos nacionales de estadísticas de México, Colombia, Argentina y Brasil. “Más bien Bolivia está muy rezagada”, dijo.
También es un indicador adoptado por el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD) y utilizado desde hace 10 años por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), explicó Escóbar.
La población cochabambina tiene bajos ingresos y precario acceso a la salud, educación y vivienda
INE DESCALIFICA VALIDEZ DEL IPM
El Instituto Nacional de Estadística (INE) descalificó ayer el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) elaborado por el Cedla al indicar que adolece de fuertes diferencias respecto a la metodología internacionalmente aceptada.
El director de Estadística del INE, Humberto Arandia, dijo que la definición de mayor aceptación señala que la pobreza es la falta de recursos en el tiempo, y la privación o carencia material es su consecuencia (Gordon, 2006). En este contexto, la pobreza se puede analizar desde el punto de vista monetario (falta de ingresos) siendo ésta la metodología más empleada en la actualidad, y también por el lado de carencias en necesidades o dimensiones.