Aeropuerto: piden control de Sedes; éste dice no tener personal
La presencia de personal del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Cochabamba en el control de pasajeros en la llegada y salida de naves se convirtió en otro elemento de discordia en la reanudación de vuelos comerciales en el país.
Desde el Sedes, en cambio, respondieron que no cuentan con el suficiente personal, además de criticar el desorden en el itinerario de salidas y llegadas.
El ministro de Obras Públicas, Iván Arias, reclamó la presencia de personal de esta instancia para el control del estado de salud de los pasajeros y lamentó que, por ejemplo, el martes pasado, no estuviera personal de esta instancia en el simulacro de vuelos.
Ayer, llegó personal del Sedes al aeropuerto Jorge Wilstermann, después de que hubiera partido el avión de las 9:30, el primero de los dos vuelos programados para la jornada, aunque después se quedó para hacer los diagnósticos a los pasajeros que llegaban.
“Tenemos personal asignado. No es gran cantidad, pero tenemos una brigada desplegada que cumple cierto horario de trabajo. No tiene regularidad en la permanencia porque tienen otras actividades”, explicó ayer el responsable de Vigilancia Epidemiológica del Sedes, Rubén Castillo.
El funcionario del Sedes reclamó al sistema aeroportuario, además, mayor orden en el itinerario de vuelos, ya que muchos de éstos se programan de madrugada, se postergan o se adelantan. Añadió que también existe personal de salud propio del aeropuerto.
La brigada del Sedes, según Castillo, está compuesta por tres médicos y trabajan dependiendo de los vuelos, donde se originan las discrepancias con el personal del aeropuerto y de la línea aérea, principalmente por el tema logístico, ya que muchos de los viajes parten de madrugada.
Castillo, sin embargo, agregó que el control debe ser tanto en la salida como en la llegada de los vuelos. Además, reconoció que tampoco los controles tampoco son una garantía, pues muchos pasajeros han podido pasar los controles al no presentar síntomas.
El viernes de la semana pasada, cuatro pasajeros de Trinidad (Beni), que ya portaban el virus, abordaron un avión de BoA sin que el personal del Sedes haya podido detectar síntomas, tanto en la salida como en la llegada. Tres de estas personas, que pertenecían a una misma familia, fueron hospitalizadas en La Paz, un día después de haber llegado a esa ciudad. La cuarta persona se bajó en Cochabamba y, tras peregrinar por varios hospitales y negarse a ser internada, falleció el lunes.
Otras irregularidades
En cuanto a las irregularidades ocurridas el pasado miércoles, primer día de la reanudación de vuelos comerciales en tres ciudades del país, el Ministro de Obras Públicas pidió un informe a todas las instancias implicadas, según se supo extraoficialmente.
Estas instancias son Servicios Aeroportuarios Bolivianos (Sabsa), la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana), la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y Boliviana de Aviación (BoA), entre otras.
Ese día, una nave de BoA que partió de La Paz rumbo a Santa Cruz tuvo que aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Cochabamba debido a que la Gobernación del departamento oriental no había autorizado la llegada de aviones al aeropuerto de Viru Viru.
Un experto explicó a este medio que el problema surgió porque antes bastaba informar a las instancias aeronáuticas, pero con la cuarentena, un decreto otorga potestad a las gobernaciones. El vuelo fue repuesto más tarde bajo la figura de “vuelo humanitario”.
Actualmente, sólo hay vuelos a Cochabamba, La Paz y Sucre. Ayer, partieron dos vuelos de Cochabamba a La Paz.
El personal del Sedes llegó ayer al aeropuerto Jorge Wilstermann después de la partida del avión.
