YPFB revierte ductos para traer crudo y ahorrar $us 500 MM en compra de diésel
La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) pretende ahorrar para el segundo semestre de este año 500 millones de dólares en la importación de combustibles. Para lograr este objetivo, aumentó las importaciones de diésel por occidente y revierte sus ductos otrora pensados para exportar hidrocarburos, con el fin de traer crudo a sus refinerías.
Bolivia gastó el año pasado alrededor de 4.300 millones de dólares en la compra de diésel y gasolina que dentro el país se venden a precios subsidiados. Esto representa para el Gobierno un monto sumamente alto que desgasta las Reservas Internacionales Netas (RIN).
Por ello, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, explicó ayer en medios estatales su estrategia para reducir esta pesada carga económica.
Recordó que, años atrás, se importaba más de 53 por ciento de combustibles por el oriente del país, lo cual es más costoso; pero ahora más del 60 por ciento se importa por occidente, lo cual ya ha generado un ahorro diario de 2 millones de dólares. “Y al segundo semestre de 2023 ahorraremos 500 millones con la reversión de ductos”, dijo Dorgathen.
Recientemente, la Fundación Jubileo planteó la necesidad de discutir una reducción de la subvención a los combustibles para ciertos sectores, con el fin de ahorrar los dólares.
Dorgathen dijo que actualmente se revierten ductos que antes eran utilizados para exportar diésel y ahora se los usa para traer este combustible y crudo. Ya lo hicieron con un ducto de Yacuiba a Santa Cruz. Se tiene planes de hacerlo con otro ducto desde Sica Sica hasta Santa Cruz, y otro desde Arica (Chile) hasta el altiplano boliviano.
Asimismo , el megayacimiento argentino de Vaca Muerta está en la mira de YPFB, donde busca producir crudo para traerlo al país. “Estamos viendo la opción de comprar o producir crudo en Vaca Muerta”, dijo el funcionario público.
El analista Álvaro Ríos señaló anteriormente que Bolivia debe aprovechar su infraestructura para transportar hidrocarburos para importar crudo, ahora que el país se ha convertido en importador neto de energía.
En 2022, por primera vez desde que se tiene registro en los datos públicos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Bolivia gastó más en comprar combustibles (4.300 millones) que exportando gas natural (3 mil millones). Esto se debe al declive de la producción de gas.
Intensifican la búsqueda de gas
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, informó ayer que se espera cerrar 2023 con siete proyectos de exploración en ejecución. Actualmente se tienen ya tres en funcionamiento.
Asimismo, dijo que hasta 2025 se espera ejecutar 27 proyectos de exploración.
“Como la exploración puede durar mucho tiempo, entonces trabajamos a corto plazo cerca de lugares donde ya disponemos de infraestructura, lo cual nos tomará entre tres y cinco años en conseguir resultados”, dijo a la prensa.