Fiscalía inicia proceso por amenazas de avasalladores contra empresarios en Guarayos
La Fiscalía Departamental de Santa Cruz inició una investigación de oficio contra los que advirtieron con tomar armas para tomar tierras en la zona de Guarayos, en Santa Cruz.
El fiscal departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca, informó la noche de este miércoles que se abrió un proceso por instigación pública a delinquir contra el dirigente de los interculturales de San Julián, Nicolás Ramírez Taboada, que amenazó con “agarrar armas” para defender las tierras que avasallaron.
“De oficio se ha abierto una denuncia contra una persona que mediante las redes ha cometido un delito y se ha abierto la investigación por el delito de instigación pública a delinquir”, señaló Mariaca. Un fiscal ya se hizo cargo del caso.
El fiscal departamental dijo que estas amenazas son contra las familias de los cruceños y que no se puede hablar libremente del uso de armas, por lo que se tomarán las acciones necesarias para que se haga cumplir la ley.
“Vamos a agarrar armas y nos vamos a hacer respetar”, fueron las palabras de Nicolás Ramírez Taboada, de la Federación Intercultural de San Julián, que llamó a los miembros de su gremio a responder de manera violenta en contra del grupo con el que pugnan por tierras.
Este dirigente se encuentra con un proceso en la justicia por los hechos violentos en Las Londras, propiedad avasallada en la provincia Guarayos.
“Nos dieron plomo, nosotros nos vamos a defender ahora sí con armas. Nosotros planificaremos, vamos a ir armados”, señaló.
Además, este miércoles, otro dirigente, llamado Tito Rojas, leyó una resolución en la que se amenazaba de muerte a los empresarios que son dueños de los predios avasallados en la provincia Guarayos.
“Condenamos a muerte a los empresarios terratenientes asentados en el sector Las Londras por el acto criminal que ejecutaron en contra de nuestros hijos. Condenamos a muerte a los matones en las empresas por quitar la vida de nuestros hijos de la familia intercultural de San Julián”, leía Tito Rojas la resolución 11-2023 de los interculturales.
A lado de Rojas se encontraba Sixto Canazas, uno de los principales acusados del secuestro y tortura de un grupo de civiles en Las Londras.