Anapo ve difícil un repunte del sector oleaginoso tras pérdidas debido a la sequía
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) ha expresado su escepticismo respecto a un posible repunte del sector agrícola, como espera el Gobierno, tras la pérdida de 800 mil toneladas de grano de soya debido a la sequía. Este contratiempo no sólo afecta la producción interna, sino que también disminuye significativamente el flujo de dólares hacia el país.
“Vemos difícil un repunte por las pérdidas productivas que hemos tenido en esta campaña de verano pasado, de al menos 800 mil toneladas de grano, que significan menos excedentes para la exportación”, declaró Jaime Hernández, gerente general de Anapo, en contacto con Los Tiempos.
El Gobierno había anticipado un mayor flujo de dólares entre mayo y junio, impulsado por las exportaciones agropecuarias, principalmente de soya. Sin embargo, el INE registró un superávit comercial de sólo 4,5 millones de dólares en abril de este año, una cifra que, aunque positiva, sigue siendo menor en comparación con el año anterior.
Las exportaciones de soya y sus derivados en el primer cuatrimestre de 2024 mostraron una caída del 38 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2023, pasando de 429 millones de dólares a 264 millones. El gerente de la Anapo atribuyó esta disminución a factores climáticos y logísticos.
“Las exportaciones de soya se han visto disminuidas debido a los problemas logísticos generados por los bloqueos y por el bajo caudal de navegabilidad en la hidrovía Paraguay-Paraná, además de la sequía. En valor, disminuyeron por la menor cotización en mercados internacionales”, explicó.
A pesar de que los procedimientos para la exportación se agilizaron tras un acuerdo de 10 puntos con el Gobierno, Hernández dijo que esto no será suficiente para incrementar las divisas.
También se refirió a la falta de dólares y a las interrupciones en el suministro de combustibles. “Afecta en gran medida la actividad productiva porque no tenemos garantizado el diésel, no se puede sembrar ni cosechar y con ello se pone en riesgo la producción. Y la falta de dólares ha generado un aumento en los precios de los insumos”, concluyó.