Ministro: Normalización de suministro de combustibles será gradual en todo el país
Los bloqueos de carreteras y las tensiones políticas afectaron gravemente la distribución de combustibles en el país, provocando una sobredemanda y aumentando la incertidumbre entre la población. En respuesta, el Gobierno anunció un plan de emergencia para asegurar el suministro de gasolina y diésel en todas las estaciones de servicio hasta el fin de semana, según informó el ministro de Hidrocarburos, Alejandro Gallardo. Mientras tanto, la Asociación Nacional de Surtidores Comercializadores Privados de Hidrocarburos (Asosur) declaró el “estado de emergencia nacional”, debido a la escasez que afecta a las estaciones privadas de combustible.
El ministro Gallardo informó que el Gobierno está implementando acciones para resolver la crisis de desabastecimiento, agravada por bloqueos en varias rutas del país.
El desabastecimiento provoca largas filas en estaciones de servicio, donde consumidores, ante el temor de una posible escasez prolongada, se abastecen más allá de sus necesidades habituales. Esta sobredemanda, agravada por prácticas especulativas, está agotando los volúmenes disponibles en las estaciones, explicó el ministro de Hidrocarburos.
Además, informó que la terminal de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en Arica, Chile, sigue siendo el principal punto de ingreso de combustible al país. Sin embargo, operaciones recientes se vieron afectadas por condiciones climáticas adversas. Gallardo anticipó una mejora en el clima para este sábado, lo que permitiría la descarga y transporte de combustible hacia Bolivia, clave para normalizar la provisión en las zonas más afectadas.
Trato desigual
En medio de la crisis, Asosur declaró el “estado de emergencia nacional”, debido a la insuficiencia de combustibles en las estaciones privadas. La asociación denunció lo que considera un trato “discriminatorio” en la distribución, afirmando que se favorece a las estaciones operadas por YPFB en detrimento de las privadas. Según Asosur, este trato desigual afecta, particularmente, a estaciones en zonas urbanas y rurales, limitando su capacidad de abastecimiento.