Misicuni toma el control de las obras
La Empresa Misicuni tomó el control de las obras de construcción de la represa del Proyecto Múltiple Misicuni, ayer, en ausencia de representantes del Consorcio Hidroeléctrico Misicuni, que un día antes presentaron un recurso para revocar la resolución del Contrato 10/09 a pesar de que a fines de noviembre aceptaron realizar una transición pacífica.
La toma física de las obras de la represa y de los proyectos adicionales se realizó por decisión del presidente de la Empresa Misicuni, Jorge Alvarado, quien el 5 de noviembre notificó al Consorcio con la decisión de resolución del contrato con el argumento de que el grupo empresarial, compuestos por cuatro empresas internacionales y una nacional, no superó su iliquidez y tenía sus cuentas congeladas. La Empresa se amparó en la cláusula 21 (terminación del contrato), que establece que se puede terminar el contrato: “Cuando el contratista se convierte en insolvente”.
El presidente de la Empresa Misicuni expresó que después de esta toma física, se tiene previsto reiniciar las obras en una semana en algunos frentes de trabajo. Explicó que en los siguientes días el directorio se reunirá para definir las acciones a tomar entre la contratación de personal y el reinició de los trabajos.
Alvarado aseguró que después de resolver el contrato se realizó un corte que debía durar 14 días hábiles, en los cuales se concluyó el inventario de la represa Misicuni y la planta de tratamiento de Jove Rancho. “Este corte se ha realizado con la finalidad de hacer un inventario del estado de la obra, los equipos que existen, este trabajo ha terminado el miércoles. Ahora hemos tomado posesión de toda la obra y sus instalaciones para continuar con los trabajos a más tardar en una semana”.
Añadió que la obra tendrá un desfase en su entrega debido a que está paralizada más de un mes pero será entregada en 2014.
“El desfase será inevitable pero sí esta obra será entregada el próximo año”, aseguró.
Consorcio
El representante legal del consorcio, Raúl Nemtala, expresó que la toma sólo fue un acto mediático y que no era necesaria.
“Nadie está en posesión de nada, la represa es un obra pública, por lo que me parece un acto innecesario, el Consorcio no tiene intención alguna de perjudicar las obras”.
El Consorcio presentó el miércoles un recurso para revocar la resolución del contrato y poder continuar con la administración de la obra debido a que considera injusta la anulación del acuerdo y denunció abusos de parte de la empresa supervisora Engevix-Caem, además considera que su iliquidez fue provocada por la Empresa Misicuni. “La Empresa Misicuni nos debe más de 7 millones de dólares hace más de tres años esta situación provocó la iliquidez”, afirmó.