Una riada de “terror” daña turismo y cultivos en Arani
Hace 40 años, 1976, que Arani no sufría una riada de magnitud como la del pasado 27 de febrero que azotó a la comunidad turística de Pocoata, en el valle alto. Una semana después del fenómeno aún se puede percibir el temor de los pobladores a un nuevo desastre. El turbión se llevó dos vehículos, sepultó cultivos, hundió un puente, mató animales y afectó a seis localidades.
La gente mira las nubes constantemente para ver si hay amenaza de tormenta y creen que el desastre fue por el fenómeno de El Niño, que en los últimos meses provocó emergencias en 22 de 47 municipios de Cochabamba por heladas, sequías e inundaciones.
Los testigos de la insólita riada dijeron que todo comenzó, el sábado por la tarde, con una intensa lluvia y truenos en el poblado de Puyo Puyo Chico que duró una hora y media.
Después de un sonido comparado al “tropel de caballos” (ruidoso) el agua llegó con fuerza a Pocoata Alta, a cinco kilómetros de Arani. El desborde duró minutos, las aguas crecieron tres metros y el afluente de ocho metros se amplió a 50.
El fenómeno duró 45 minutos mientras la población “estaba tensa y asustada”. Entonces, lo que una vez fue un bosque con un río tranquilo donde los turistas locales, de Europa y Estados Unidos visitan los molinos de agua se convirtió en un turbión que arrastró piedras, árboles, cultivos y vehículos.
El fenómeno afectó el puente de Collpa Bajo, que conecta los municipios de Arani y Villa Rivero. La estructura se hundió 50 centímetros y se tuvo que cerrar.
La cancha deportiva del lugar quedó cubierta con una alfombra de piedras y ocho casas sufrieron daños. Después del desastre la población pidió a la Gobernación y Alcaldía desplazar maquinaria pesada al lugar para retirar las piedras y árboles que arrastró el río. También demandan el dragado del cauce y construir defensivos.
Perjuicio
La riada dejó pérdidas económicas. Uno de los afectados fue el criador de truchas y carpas, Remberto Ampuero, que tiene un estanque a orillas del río.
Desolado, contó que perdió cerca de 100.000 bolivianos porque el agua ingresó a sus seis piscinas de cría de peces. “Depende de nuestro Señor cuándo nos recuperamos”, señaló consultado sobre en cuánto tiempo podrá recuperar su inversión.
El productor decidió no esperar a las autoridades y alquiló maquinaria para retirar las piedras y árboles del río. Con él, los miembros de su familia coadyuvan con el trabajo. “La gente está pidiendo a Dios que el Gobernador haga conciencia y mande de una vez por todas maquinaria de equipo pesado”, concluyó.
Cristian Rosales Rosas contó que la riada llegó como un “temblor” y se llevó medio terreno de cultivos de maíz de su madre.
“La gente tiene miedo, cuando ve que está nublado ahí arriba ya piensa que vendrá más agua. La otra vez ha sonado mucho y pensaron que iba a llegar harto, pero por suerte poquito ha llegado”, dijo. Recordó que hace 40 años hubo una riada similar.
El impacto también fue turístico porque Pocoata es conocida como el centro de los molinos de agua. La gente teme que la afluencia de visitantes que llegan incluso de Noruega y España disminuya. De los 70 molinos de agua que había hace 50 años, ahora sólo funcionan dos.
RELATOS SOBRE EL DESASTRE NATURAL
“La riada llegó después de 40 años”
REMBERTO AMPUERO, POBLADOR
Este aguacero arrasó igual que cuando tenía 17 años. Eso es por lo menos 40 años atrás (….) Desde Vacas he visto que estaba lloviendo a todo dar, mi celular estaba mal no podía comunicarme. Tal vez algún estrago está haciendo, semejante lluvia he dicho. Cuando llegué a Arani vi que el agua estaba arrasando por todo el lugar. Ahí me dice mi yerno que se lo ha llevado dos autos, se lo sacó entre medio de los bosquecillos. Al otro yerno le llamo y me dice que logró sacar su auto hasta el camino. (…) Cuando llegué no he derramado ninguna lágrima pero estaba traumado totalmente, más que loco estaba al ver el desastre.
“El agua llegó como tropel de caballos”
JULIO CÁCERES, POBLADOR
El agua llegó en dos tiempos, primero pausadamente donde estaba estable por lo menos una hora y media tipo las 14:00. Luego llegó directamente con fuerza avasalladora. Arrasó cultivos, pasó por el centro del bosque. Duró por lo menos unos 45 minutos. La gente estaba tensa y asustada porque nunca había pasado algo así. Dicen que esto pasó hace 40 años (…) para los que han visto antiguamente fue una novedad pero para los que por primera vez han visto fue totalmente aterrador. Vino como un tropel de caballos haciendo sonar las piedras. Nosotros conocemos ese sonido pero no tan intensamente.
“La gente ve con temor las nubes”
CRISTIAN ROSALES, POBLADOR
Me contó un señor que esto no pasa desde el 98. Río abajo hay terrenos caídos, cultivos arrasados, piletas rotas, la riada se lo ha llevado también los autos (…) Como un temblor que suena, así se ha sentido. De mi mamá está afectado su terreno, la mitad de la tierra se lo ha llevado. Ahí cultivamos maíz. La gente tiene miedo, cuando ve que está nublado ahí arriba ya piensa que vendrá más agua. La otra vez ha sonado mucho y pensaron que iba a llegar mucha agua, pero por suerte poquito ha llegado. Nunca llegó el agua así. Pedimos a la Gobernación, Alcaldía una colaboración para que levantemos las cosas porque grave está. Los molinos están paralizados.