McCain gana varias primarias; Clinton y Obama, más parejos
Washington | AP
John McCain ganó ayer una serie de primarias en estados de la Costa Atlántica, en su empuje por dominar la contienda por la candidatura republicana. Hillary Rodham Clinton y Barack Obama se repartieron victorias en la arduamente disputada campaña demócrata.
Hasta el cierre de la presente edición (23:30), McCain, cuya campaña hace seis meses parecía a punto de naufragar, ganó en Nueva Jersey, Connecticut y Delaware, llevándose los 97 delegados de estos tres estados, y sumó a Illinois en su columna.
Mike Huckabee ganó las primarias republicanas en Alabama, Arkansas del cual fue gobernador y Virginia Occidental.
Mitt Romney, ex gobernador de Massachusetts, ganó en su estado.
Clinton, que aspira a ser la primera presidenta mujer, ganó en Nueva York, al que representa en el Senado, Massachusetts, Nueva Jersey, Oklahoma, Tenesí y Arkansas, del cual fue primera dama durante más de una década.
Obama, que espera ser el primer presidente negro, ganó en Georgia, Delaware, Alabama e Illinois, estado por el cual es senador.
The Associated Press basó sus proyecciones en encuestas de boca de urna.
Los republicanos tenían en juego 1.023 delegados de 21 estados. Conocidos los primeros resultados, McCain había ganado 79 delegados para un total de 181; Romney ninguno para un total de 93; y Huckabee 18 para un total de 61. Se necesitan 1.191 delegados para ganar la candidatura en la convención.
Los demócratas se repartían 1.681 delegados en 22 estados y el territorio de Samoa Americana. Al conocerse los primeros resultados, Clinton tenía 21, para un total de 285, y Obama 31, para un total de 236. Se necesitan 2.025 delegados para ganar la candidatura demócrata.
Impredecible
Después de una serie de primarias en estados individuales, que otorgaban pocos delegados, el Súper Martes fue todo lo contrario: un conjunto de elecciones y asambleas que abarcaban casi medio país, en la campaña presidencial menos previsible que se recuerde.
Las encuestas sugirieron algunos cambios sutiles en el panorama político.
McCain tenía una ventaja ligera entre los votantes que se identifican como republicanos, un grupo que no lo había apoyado en ninguna de las contiendas anteriores. Como había ocurrido antes, McCain se mostraba fuerte entre los independientes.
Romney estaba recibiendo los votos de cuatro de cada 10 personas que se identificaban como conservadoras. McCain ganaba un tercio del apoyo en ese grupo, y Mike Huckabee recibía uno de cada cinco de esos votos.
Clinton tenía sólo una ventaja magra entre las mujeres y los votantes blancos, dos grupos que la han apoyado en las primarias anteriores, de acuerdo con encuestas a boca de urna en 16 estados. Obama estaba ganando una mayoría arrolladora del voto de los negros y Clinton recibía el apoyo de casi seis de cada 10 hispanos.
La ex primera dama confiaba en esas preferencias entre los hispanos, mientras el Súper Martes continuaba en Arizona, Nuevo México y California, considerado el premio mayor de la jornada, con 370 delegados.
Alabama y Georgia dieron a Obama tres triunfos seguidos en los estados del sur. Al igual que el mes pasado, en Carolina del Sur, fue apoyado decididamente por los votantes negros.
Los estadounidenses de ascendencia africana abarcaron algo más de la mitad de los sufragios en Georgia, y él obtuvo el 90 por ciento de éstos. Clinton obtuvo el 60 por ciento de los votos blancos, una ventaja menor que la lograda en primarias anteriores.
Los demócratas otorgan delegados aproximadamente en proporción a los votos obtenidos, a diferencia de los republicanos, que en varios estados otorgan todos los delegados al ganador.
PRIORIDADES
Tanto los demócratas como los republicanos señalaron que la economía era el tema más importante.
Los demócratas dijeron que el segundo tema más relevante era la guerra en Irak y el tercero era la atención a la salud.
Los votantes en las primarias republicanas señalaron que la inmigración era el segundo tema más importante después de la economía, seguido por la guerra en Irak.
Emoción por un Súper Martes inédito
Aún en los estados donde no hubo votación, los electores del país se entusiasmaron por una jornada de contiendas políticas como no se había visto en la historia de Estados Unidos: una serie de primarias y asambleas, de costa a costa y en 24 estados, en pos de la candidatura presidencial.
En un Súper Martes inusitado el primero en más de medio siglo en el que no contendía ningún presidente o vicepresidente en funciones fue la primera vez que semejante número de votantes se pronuncia simultáneamente para definir a su candidato.
En Alaska, la gente en la comunidad de Fort Yukon desafió el crudo invierno para reunirse en una asamblea, poco antes de que cayera la noche, dentro del vestíbulo de una radiodifusora. La temperatura era de menos 48 centígrados.
En el bajo Manhattan, muchos votantes debieron abrirse paso entre los eufóricos seguidores de los Gigantes de Nueva York, en medio del desfile para celebrar la conquista del Super Bowl.
En Florida, los funcionarios electorales de todo el estado recibieron cientos de llamadas de votantes confusos, quienes preguntaban dónde podían votar el martes. No se enteraron de que las primarias en Florida se realizaron la semana anterior.
Había dos punteros claros en la contienda de los republicanos y en la demócrata. Y muchos votantes se mostraron maravillados por la novedad que representan esos aspirantes.