Incendio de cementerio de neumáticos en España continuará activo dos semanas
El incendio declarado hace tres días en el mayor cementerio de neumáticos de Europa, ubicado a unos 35 kilómetros de Madrid, tardará todavía unas dos semanas en poder extinguirse, según indicaron hoy representantes de la administración regional.
La calidad del aire de las localidades cercanas no presenta actualmente ninguna anomalía, aunque sí existe contaminación en las capas altas de la atmósfera, reconocieron hoy los responsables de Medio Ambiente de las regiones de Castilla La Mancha y Madrid, Francisco Martínez Arroyo y Jaime González Taboada, respectivamente.
El cementerio, declarado ilegal en el año 2009 por las autoridades judiciales, se sitúa en ambas regiones debido a sus grandes dimensiones. Considerado el mayor de Europa, acumula cinco millones de ruedas usadas, unas 100.000 toneladas, que se expanden a lo largo de 11,5 hectáreas y en algunos puntos tiene una altura igual a la de un edificio de siete plantas.
Las previsiones apuntan a que el incendio quedará extinguido en diez o quince días, y un tercio del terreno que acumulaba los neumáticos se salvará de las llamas, por lo que quedarán indemnes unas 30.000 toneladas de neumáticos.
Una vez finalizadas las labores de extinción, en las que trabajan 18 bomberos, se constituirá una mesa de trabajo para acometer un proyecto de recuperación de la zona y reciclar los neumáticos que queden, anunciaron hoy ambos responsables.
Las autoridades regionales, que han pedido a los vecinos que permanezcan en sus casas, decidirán hoy, en base a los informes técnicos de calidad del aire, si mañana permite la apertura de los colegios en la población más cercana, ya que hoy es día festivo.
Los neumáticos comenzaron a acumularse en dos fincas particulares sin licencia en la zona a finales de los años 90, pero la montaña creció tanto que comenzó a ocupar terrenos de municipios cercanos, lo que generó querellas en los juzgados por daños medioambientales.
El responsable del cementerio de neumáticos está en paradero desconocido y ha recibido multas por importe de 600.000 euros de distintas administraciones españolas.
La Guardia Civil española trabaja con la hipótesis principal de que el incendio fue intencionado, aunque por el momento no descarta otras vías de investigación.
