Trump confirma que Nikki Haley dejará la ONU
Nikki Haley sorprendió ayer en Washington y en la ONU por su decisión de dejar a finales de año el cargo de embajadora de EEUU ante Naciones Unidas, una decisión acompañada de su promesa de no interferir en la reelección de Trump, con quien discrepó antes y después del inicio de su Presidencia.
Una sorpresa que también lo fue para el propio Presidente de EEUU puesto que en su comparecencia en la Casa Blanca junto a Haley —una de las pocas voces femeninas de su gabinete— Trump tuvo que admitir que no tendrá el nombre de su sucesor hasta dentro de dos o tres semanas.
Nikki Haley (Bamberg, Carolina del Sur, 1972) se dio conocer a nivel internacional cuando fue nombrada en enero de 2017 la voz de la Administración Trump ante la ONU y enseguida tomó relieve por sus duros discursos en Naciones Unidas y su imagen de independiente.
La embajadora ante la ONU, hija de inmigrantes de la India, se presenta como una figura muy diferente a la del magnate neoyorquino, un contraste que se evidenció con la criticada reacción de Trump a la demostración de fuerza de neonazis y supremacistas blancos en Charlottesville (Virginia).
Trump dijo ayer que cree que su hija y asesora Ivanka sería una “increíble” embajadora de EEUU ante la ONU, pero que si la nombrara para el cargo le acusarían de nepotismo.
“He escuchado muchos nombres (para ocupar el cargo). He escuchado el de Ivanka. Creo que Ivanka sería increíble (…). Ivanka sería dinamita”, dijo Trump. No obstante, el mandatario aseguró que no quiere ser acusado de “nepotismo” por designar a su hija para un puesto tan importante.