España elige un nuevo presidente con un futuro incierto e inédito
España medirá su madurez democrática hoy en las elecciones presidenciales, las terceras que se celebrarán desde 2015, síntoma de la inestabilidad política que vive el país en los últimos años.
Las encuestas dibujan un escenario electoral complejo con cinco partidos políticos a nivel nacional con opciones de jugar un papel relevante a la hora de formar Gobierno.
Según el cálculo promedio de los sondeos publicados desde que se convocaron los comicios realizado por el medio local El Periódico, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE, centro izquierda) ganaría las elecciones, seguido del Partido Popular (PP, centro derecha), Ciudadanos (C’s, derecha), Unidas Podemos (UP, izquierda) y VOX (ultra derecha).
Sin embargo, ninguna encuesta es capaz de vaticinar con exactitud si las hipotéticas coaliciones entre las fuerzas de izquierda o los pactos de derecha serán capaces de sumar los 176 escaños necesarios, la mitad más uno de los 350 que tiene el Congreso de los Diputados de España, para sacar adelante un Gobierno.
Con este panorama, es seguro decir que estos cinco partidos tendrán que buscar pactos y coaliciones entre ellos para poder gobernar un país que desde el inicio del periodo democrático (1978) se ha caracterizado por un marcado bipartidismo (PP y PSOE).
Escenario inédito
El experto en teoría política y profesor en la Universidad de Alicante Víctor Alonso destaca que España presenta “un escenario inédito, en el que ya son cinco los partidos que según los sondeos están sobrepasando la barrera del 10 por ciento”.
En la última cita con las urnas celebrada en España fueron cuatro los partidos que se repartieron la mayoría de los votos: PSOE, PP, CiU y UP.
Sin embargo, el analista político Roberto Covarrubias explicó que estas elecciones tienen “un nuevo elemento, que es VOX. Todo el foco de atención está puesto en este partido de extrema derecha por lo que puede hacer en términos de alianzas, porque la fragmentación del parlamento puede ser incluso mayor en los anteriores comicios”.
Los analistas destacaron que tras las últimas elecciones, celebradas en junio de 2016, la clase política encontró dificultades para pactar entre PSOE, Podemos, Ciudadanos y PP y temen que el surgimiento de los ultraderechistas de VOX puede complicar aún más posibles pactos tras las presidenciales de hoy.
Punto de inflexión
Estos comicios presidenciales pueden significar un punto de inflexión en la política española por varias razones, según los analistas políticos.
En primer lugar, consumarán un relevo generacional. Cualquiera que sea el nuevo presidente, su marca será la postransición
En consecuencia, previsiblemente, abrirá un tiempo político nuevo.
En segundo lugar, el significado de la elección va más allá de los líderes o de los partidos y del horizonte temporal de los próximos cuatro años, con capacidad para definir el tono general de la política española para una etapa más larga.
La disyuntiva entre sosiego y crispación, entre diálogo y tensión, se resume en propuestas bien diferenciadas en bloques ideológicos que manifiestan respuestas disímiles a cuestiones básicas y centrales como el problema territorial (Cataluña), el incremento de la desigualdad, el modelo de sociedad, la llamada memoria histórica, etc.
En tercer lugar, cuando los efectos más severos de la crisis de 2008 inician una lenta superación, el mapa político también puede iniciar una reordenación o corrección poscrisis.
Si aquella crisis transformó el bipartidismo de la política española en un escenario a cuatro, con la emergencia de fuerzas como Ciudadanos o Podemos, estas nuevas fuerzas podrían verse convulsionadas en su arraigo electoral no solo por la irrupción de un tercer factor, la extrema derecha representada por VOX, sino por un reposicionamiento del voto a derecha e izquierda que puede ofrecer una nueva radiografía política.
En cuarto lugar, España tiene en estas elecciones la oportunidad de atajar los principales riesgos asociados al populismo o dejarse llevar por la misma espiral que sacude otros países europeos.
No cabe esperar, en cualquier caso, mayorías absolutas.
Cerca de 37 millones de españoles están convocados a elegir 350 diputados y 208 senadores, y los indecisos varían entre el 25 y algo más del 40 por ciento, según las encuestas.
VOTACIÓN EN BOLIVIA
Puntos en La Paz y Santa Cruz
La embajada española en Bolivia habilitó dos colegios electorales: en La Paz y Santa Cruz, los mismos que reciben los votos desde el miércoles.
Mario Crespo Ballesteros, cónsul español en La Paz, dijo que los españoles que residen en Cochabamba, Oruro, Sucre y Potosí sufragan en La Paz, y los que viven en Beni, Pando y Tarija lo hacen en Santa Cruz.
El diplomático informó que en Bolivia existen alrededor de 15 mil residentes españoles con derecho a voto, pero que no todos se habilitaron, ya que debían pedir el voto rogado a su país para habilitarse. El voto en España no es obligatorio.
ANÁLISIS
El PSOE debe buscar una alianza estratégica
Alfredo Jiménez Pereyra Editor Mundo
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, líder del PSOE, ganaría las elecciones, pero podría prescindir del apoyo de independentistas catalanes para gobernar, según las proyecciones del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
El CIS destaca que una alianza de la derecha con la extrema derecha no obtendría en ningún caso los 176 escaños —sobre 350— necesarios para gobernar.
Todos los estudios dan como ganador al PSOE, pero prevén que tendrá que gobernar en coalición, ya sea con la centroderecha liberal de Ciudadanos, algo que esta última formación descarta totalmente, o con Unidas Podemos y el apoyo de pequeñas formaciones.
Según el CIS, el PSOE obtendría un 30,2 por ciento de los votos y entre 123 y 138 diputados, muy por delante de su archirrival, el PP que con 17,2 por ciento y entre 66 y 76 escaños terminaría con su peor resultado en 40 años.
DISCORDIA TOTAL
Cataluña enfrenta a Podemos y C’s
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, defendió el referendo del 1-O, culpó al Gobierno y a la Generalitat a partes iguales y ha defendido que los imputados por el procés son “presos políticos”.
La unidad de España ha sido la seña de identidad de Albert Rivera de Ciudadanos y su lucha contra el separatismo es en gran parte lo que le permitió entrar en el Congreso de los Diputados.
En Cataluña, los independentistas serán dominados por la izquierda republicana de ERC, con 17 y 18 escaños y los separatistas de centroderecha de JxCat se quedarían con 4 y 5.
Vox, el partido que puede cambiar el mapa político
A la derecha de la derecha, VOX es el partido que ha irrumpido, por impetuoso y vehemente, en el escenario político español para marcar la agenda de las principales fuerzas que concurren a las elecciones generales.
Aunque fue creado en 2013, VOX llevó una vida casi anónima hasta que saltó a la primera línea tras las elecciones regionales andaluzas de diciembre pasado, en las que obtuvo 12 diputados y ayudó al PP y C’s a forjar una coalición de derecha, tras casi 40 años de hegemonía socialista en esa importante región.
Está por ver cuántos escaños consigue hoy en el Congreso de los Diputados, el Parlamento nacional, aunque los sondeos de intención de voto coinciden en que la cifra oscilaría desde unos 20 hasta unos 40 (de un total de 350).
Españoles vivieron ayer “jornada de reflexión”
Madrid
Efe
Los españoles vivieron ayer un día de calma, oficialmente llamado “jornada de reflexión”, de cara a las elecciones de hoy, las más abiertas y con más incógnitas de las últimas décadas, con la novedad de la más que probable irrupción de la ultraderecha.
En esta jornada de reflexión está prohibido pedir el voto, por lo que la mayoría de dirigentes, como el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez o el líder del conservador Partido Popular (PP) Pablo Casado pasan el día en familia, ambos en pequeñas localidades rurales fuera de Madrid.