Temor a redadas masivas ronda a miles de inmigrantes en EEUU
La amenaza del inicio el próximo domingo de redadas masivas de indocumentados en EEUU revivió ayer el temor entre las comunidades de inmigrantes, mientras los demócratas calificaron de “brutales” estas acciones y advirtieron de que separarán “a muchas familias”.
Un día después de que las autoridades estadounidenses confirmaran un leve descenso en la detención de inmigrantes en la frontera, del que se puede inferir un retroceso en el paso de indocumentados, medios de comunicación locales informaron del comienzo a partir del domingo de las temidas operaciones en al menos diez de las principales ciudades del país.
El diario The New York Times indicó, citando a dos funcionarios y a un extrabajador del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), que pidieron el anonimato, que las redadas estarán a cargo de personal del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
“En esas deportaciones, las autoridades podrían detener a inmigrantes que estén en el área aún cuando ellos no fueran los buscados”, añadió el periódico.
“En la medida en que sea posible, los miembros de familias arrestados juntos serán llevados a centros de detención para familias en Texas y Pensilvania. Pero, debido al espacio limitado, algunos podrían terminar en hoteles mientras se preparan sus documentos de viaje”, agregó.
Los funcionarios consultados por The New York Times señalaron que ICE buscará primero a unos 2 mil inmigrantes que ya han recibido órdenes de deportación y que, en algunos casos, no se presentaron a las audiencias en los tribunales de inmigración.
Entre las ciudades donde podrían ocurrir esas redadas se cuentan Chicago, Baltimore, Nueva York, Houston, Los Ángeles y Miami.
Por el momento, las autoridades no han confirmado esos datos, aunque el miércoles el director interino del Servicio de Inmigración y Ciudadanía, Ken Cuccinelli, dijo que las redadas “van a llevarse a cabo” sin ofrecer más precisiones. A mediados de junio, el presidente de EEUU, Donald Trump, había anunciado por Twitter que ICE iniciaría un proceso para deportar a “millones” de indocumentados.
Trump, que dio en ese entonces un plazo de dos semanas para que demócratas y republicanos encontraran una solución a los problemas de asilo y los vacíos legales en la frontera, abrió nuevamente esta opción hace unos días, cuando anticipó que las redadas empezarían después del 4 de julio.
Un portavoz de ICE dijo ayer que por razones de “seguridad” y “protección” del personal de esa agencia no ofrecerán “detalles específicos relacionados con las operaciones”.
El portavoz indicó que ICE “prioriza el arresto y la deportación de extranjeros que permanezcan ilegalmente que representan una amenaza para la seguridad nacional, la seguridad pública y la seguridad fronteriza”.
Además, apuntó que el 90 por ciento de los extranjeros arrestados por la división de Aplicación y Expulsión de ICE durante el año fiscal 2018 (octubre 2017 - septiembre 2018) tenían al menos una condena o cargos criminales pendientes, eran fugitivos de esa agencia o reingresaron ilegalmente al país tras haber sido deportados.
2.000 inmigrantes irregulares son los primeros que están en la mira de las autoridades estadounidenses para su deportación.
RECHAZAN LAS REDADAS
En Nueva York, el alcalde Bill de Blasio pidió ser “conscientes” de los derechos de los indocumentados si un agente de inmigración llega a su hogar o se aproxima en un lugar público.
En Chicago, la alcaldesa Lori Lightfoot afirmó que la principal urbe del estado de Illinois “es y siempre será una ciudad acogedora que no tolerará que se separe” a las familias.
Gavin Newsom, gobernador de California —el estado con mayor número de indocumentados—, urgió a prepararse para cualquier contingencia con ICE, pues es “vital” saber que los indocumentados también tienen derechos.
INCLUIRÁN PREGUNTA DE CIUDADANÍA EN CENSO
EFE
El presidente Trump tiene previsto recurrir a un decreto, una prerrogativa que le permite eludir el control del Congreso, para incluir en el censo una controvertida pregunta sobre la ciudadanía de la población.
Esta posibilidad se produce pocos días después de que Trump prometiera “seguir adelante” con sus planes de introducir una pregunta sobre la ciudadanía en el cuestionario del censo del próximo año a pesar de que, hace dos semanas, el Tribunal Supremo se pronunció en contra de tal medida.
La afirmación de Trump generó entonces confusión porque tanto el Departamento de Justicia como el de Comercio, del que depende el censo, habían ya anunciado que comenzarían a imprimir los formularios para el censo sin la pregunta sobre ciudadanía.
LOS DEMÓCRATAS ADVIERTEN A TRUMP ANTES DE UNA “INHUMANA” DEPORTACIÓN
AFP
Los legisladores demócratas pidieron ayer al presidente Trump que proteja a las familias y a los niños ante un masivo operativo para deportar a inmigrantes en situación irregular.
La líder de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi calificó los planes como un acto “sin corazón” y dijo que el domingo es el día en que muchas familias de origen latino van a la iglesia.
“Las familias deben estar juntas, todo el mundo en este país tiene derechos. Muchas de estas familias tienen estatuto mixto”, dijo en referencia a que en los hogares viven personas en situación irregular con hijos o esposos estadounidenses o que tienen una situación migratoria legal.
El líder de la minoría demócrata en el Senado Chuck Schumer pidió que “dejen que separar a los niños de sus familias”.
“Díganles a sus agencias que dejen de separar a los niños de sus padres”, instó.
Varias organizaciones de derechos humanos se agruparon para demandar al fiscal general, William Barr y a las agencias involucradas en los procesos para impedir las deportaciones, afirmando que esto viola el debido proceso.
Ken Cuccinelli, el director interino de la Oficina de Servicios de Ciudadanía e Inmigración en la Casa Blanca, dijo que el organismo está autorizado a expulsar a cerca de un millón de personas.