Continúan las protestas en Barcelona y otras ciudades
Barcelona fue escenario ayer de una batalla campal entre Policía e independentistas catalanes, denunciada contundentemente por el Gobierno español, en el segundo día de protestas en la región por la condena a prisión de nueve líderes separatistas.
Por la noche, contenedores ardiendo iluminaban el elegante paseo de Gracia barcelonés. Algunas calles aledañas estaban cortadas por barricadas y se producían carreras de policías y manifestantes que les lanzaban petardos, botellas y objetos en llamas, constató un periodista de la AFP.
En la televisión regional se vieron también enfrentamientos en ciudades como Girona, Tarragona o Lleida, donde se habían convocado concentraciones con velas frente a las respectivas sedes de las delegaciones del Gobierno español.
“La violencia de esta noche está siendo generalizada en todas las protestas”, denunció el Gobierno español de Pedro Sánchez en un comunicado.
“No estamos ante un movimiento ciudadano pacifico, sino coordinado por grupos que utilizan la violencia en la calle para romper la convivencia en Cataluña”, añadió.
Un total de 74 personas requirieron atención médica, 37 en Barcelona, según fuentes sanitarias. La Policía informó de cuatro detenciones, tres de ellas en esta ciudad.
40 mil personas
La manifestación en la metrópolis catalana fue la más numerosa, con 40 mil personas en los alrededores de la delegación del Gobierno, según la Policía municipal. La situación estalló cuando cientos de personas, muchos con la cara tapada, lanzaron objetos contra el cordón policial que protegía el edificio.
“Lo veo peor, mucho peor que hace dos años” cuando hubo el intento de secesión en esta región, decía Pedro Mayor, responsable de seguridad de un hotel del paseo de Gracia. “El problema es que esto va a ir a más”, añadió.
“Es imparable la movilización, esto va a seguir”, advertía Javier Martínez, un empleado de banca de 60 años en la protesta de Barcelona. “Hay que intentar forzar que haya un diálogo y que el Estado se siente a hablar”, añadía.
El lunes, convocadas por una misteriosa asociación Tsunami Democrático, de impulsores desconocidos, unas 10 mil personas según el Gobierno español, acudieron en vehículos, transporte público o a pie al aeropuerto barcelonés de El Prat, para bloquear hasta bien entrada la noche los accesos a la terminal.
EL FIN NO ESTÁ CERCA
Las protestas comenzaron el lunes. Las protestas habían comenzado en la víspera, luego de conocerse la condena contra nueve líderes separatistas a entre 9 y 13 años de prisión por el intento de secesión de 2017. La peor parte se la llevó el ex número dos del Gobierno separatista, Oriol Junqueras, condenado a 13 años por sedición y malversación.
Preparan huelga general desde el viernes. La movilización continúa hoy con el inicio de unas marchas desde diferentes puntos del territorio de Cataluña que el viernes deben converger en Barcelona, coincidiendo ese día con una “huelga general”.