Justicia argentina recibe demanda por crímenes contra musulmanes rohinyás
BUENOS AIRES |
La justicia argentina recibió hoy una demanda por crímenes contra musulmanes rohinyás en Birmania, en la que se acusa entre otros a Aung San Suu Kyi, Premio Nobel de la Paz en 1991, caso en el que se apeló a la jurisdicción universal.
"Esta denuncia procura la sanción penal a los autores, cómplices y encubridores del genocidio. Lo hacemos a través de Argentina porque no tienen otra posibilidad de interponer la denuncia penal en ningún otro lado", dijo a la AFP el abogado querellante, Tomás Ojea.
En la presentación, el abogado estuvo acompañado por Tun Khyn, un sobreviviente y desplazado que dirige la organización Burmese Rohingya Organisation UK (BROUK) con sede en Londres.
"Vamos a intentar que se cite a los acusados y si es necesario que se emitan órdenes de arresto internacional. Ese es el objetivo de esta denuncia, nada más y nada menos que procurar justicia", declaró Ojea.
La demanda por tortura, desapariciones, abuso sexual y otros delitos fue recibida por el tribunal federal número 1 de Buenos Aires, a cargo de la jueza María Servini, que ya tiene a su cargo otros casos por crímenes del franquismo español, también en atención a la jurisdicción internacional.
"El genocidio no está incluido porque no es un delito del código penal. Pero no obstante hay leyes que lo reconocen, leyes que reglamentan el estatuto de Roma, así que Tun Khyn pidió en la ratificación que se incluya en la carátula el
delito de genocidio. Esperamos que se haga", explicó Ojea. Unos 740.000 rohinyás huyeron del estado birmano de Rakáin (oeste) en agosto de 2017, tras una operación de represión del ejército en ese país, de mayoría budista.
Familias enteras se sumaron en condiciones muy difíciles a los 200.000 refugiados víctimas de persecuciones y ya instalados en campos del otro lado de la frontera, en Bangladés.
El año pasado, los investigadores de la ONU exigieron que se abran diligencias contra los principales generales, incluido el comandante en jefe del ejército, Min Aung Hlaing, por genocidio.