Hong Kong rechaza política de seguridad china
La Policía de Hong Kong disparó ayer gases lacrimógenos para dispersar a centenares de personas que ignoraron la prohibición de protestar contra el proyecto de Pekín de imponer en la región semiautónoma una ley de “seguridad nacional”, a la que muchos ven como el fin de la libertad en la excolonia británica.
El régimen comunista depositó el viernes en el Parlamento chino un texto que pretende prohibir la “traición, la secesión, la sedición y la subversión” en Hong Kong como respuesta a las grandes manifestaciones de la oposición democrática en 2019.
La ley de seguridad en Hong Kong tendrá que aplicarse “sin demora”, advirtió este domingo en rueda de prensa el canciller chino Wang Yi. El movimiento prodemocracia multiplicó los llamados para denunciar esta maniobra de Pekín sobre un asunto que suscita desde hace años la oposición de los hongkoneses.
Centenares de militantes salieron a la calle en la tarde de ayer coreando eslóganes contra el Gobierno.
“La gente podrá ser perseguida por lo que dice o escribe contra el Gobierno”, denunció Vincent, un manifestante de 25 años, en referencia al proyecto de ley de Pekín.
“Los hongkoneses están enojados porque no esperábamos que llegara tan rápido y tan brutalmente”, justificó. “Pero no somos bobos. Las cosas no van a hacer más que empeorar”.
Cuando los manifestantes se dirigían al barrio vecino de Wanchai, la policía cargó con gases lacrimógenos y gas pimienta. Varios manifestantes fueron detenidos.
Hacía meses que no se producían enfrentamientos de este tipo en la isla de Hong Kong, después de un año 2019 caliente.