La oposición venezolana camina sin rumbo fijo para las legislativas
La oposición venezolana atraviesa por el momento más crítico en su afán de enfrentar al oficialismo encabezado por Nicolás Maduro, al extremo de que aún no encuentra un norte que le permita la rearticulación de cara a las elecciones parlamentarias previstas para el próximo 6 de diciembre.
Para los analistas políticos, los intereses personales, apetitos políticos, estar en la palestra mundial o simplemente ser oposición sin tener programas profundos han sido algunos de los causales para la ruptura en las filas opositoras.
Según el editorial escrito por el director del diario El Nacional, Miguel Otero, señala que la puja opositora está dividida en tres frentes.
Señaló que Juan Guaidó, proclamado presidente interino de Venezuela, busca “sacar a Maduro del poder, pero no dice cómo”, aunque lleva un par de años impulsando el cerco diplomático, que incluso ha generado sanciones económicas.
En el pulso también aparece el excandidato presidencial Henrique Capriles, quien, de acuerdo con Otero, plantea ir a las “elecciones ilegítimas” e incluso tuvo acercamientos con el oficialismo para aplazar las elecciones que tendrían una observación internacional; aunque por ahora, esa gestión no da frutos.
Por último, está María Corina Machado, quien difiere de los dos mencionados y está de acuerdo con que tumben a Maduro del poder por la vía armada o desobediencia civil.
Por su parte, el internacionalista y experto en política venezolana y latinoamericana Dimitris Pantoulas consideró que, en 2020, la oposición venezolana “se queda en un callejón sin salida porque todas las opciones que tenían ya no están sobre la mesa”.
Además, “sus aliados internacionales ya no están dando los pasos (adecuados) porque están en problemas internos o porque no están tomando las acciones que podrían hacer sentar a Maduro en una mesa y negociar una salida pacífica en Venezuela”.
Capriles plantea que la opción de tener veeduría internacional en los comicios es una “rendijita” de oportunidad para presionar en el terreno político a Maduro, aunque Guaidó se mantiene en que no es viable participar, pues representaría legitimar “el fraude” electoral, reseñó Efe.
Mauricio Jaramillo Jassir, docente de relaciones internacionales de la Universidad del Rosario, sostiene que lo que pasa en Venezuela es producto de un desgaste y agotamiento de la estrategia de Guaidó a través del denominado cerco diplomático, el cual, dijo al diario español El Mundo.
Aunque hay conquistas importantes como el reconocimiento internacional y que pueda administrar las reservas del oro internacional, “esta oposición no ha pasado del simbolismo”, agregó.
En tanto, Otero aseguró que el hecho de que no haya unión en el sentido de recuperar la democracia “es grave, porque hace más difícil sacar al usurpador”, refiriéndose a Maduro.
Guadió ya no es el líder
Guaidó, un gran desconocido para la mayoría, fue capaz de lograr algo casi imposible: alinear todas las voluntades de la oposición en un mismo sentido. Eso sí, lo hizo gracias al incontestable apoyo de EU y de sus vecinos Colombia y Brasil.
Sin embargo, las grietas comenzaron a surgir y el personalismo de Guaidó derivó en unas críticas feroces a quienes se atrevían a sugerir la necesidad de reorientarse. Especialmente, se escucharon críticas cuando se negó a dialogar con Maduro.
Esa falla la aprovechó Capriles junto al que fue durante todo 2019 vicepresidente del Parlamento, Stalin González, siempre al lado de Guaidó durante su liderazgo en la Asamblea Nacional, y sentado a la mesa de diálogo con el Gobierno en el breve tiempo que fue posible.
No sólo son Capriles y González. Quizás la voz más crítica ha sido la de María Corina Machado, quien calificó el último llamado de unidad de Guaidó como “una agenda de distracción”.
Y le asestó la gran condena: “El país te dio una tarea que no has podido o querido cumplir”.
Datos: Agencias e Internet
COALICIÓN CHAVISTA SE REFUERZA
El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, dijo que en la coalición chavista participarán Patria Para Todos (PPT) y Tendencias Unificadas Para Alcanzar el Movimiento de Acción Revolucionaria Organizada (Tupamaro), reseñó AFP.
En el caso del PPT se conformó una coalición junto a otras organizaciones de izquierda críticas del chavismo, encabezada por el Partido Comunista de Venezuela (PCV).
El resto de partidos que forman el Gran Polo Patriótico, como se llama la plataforma chavista, son Alianza para el Cambio, Por la Democracia Social (Podemos), Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), Unidad Popular Venezolana y Organización Renovadora Auténtica (ORA).
ANÁLISIS
ANTE UN CALLEJÓN SIN SALIDA
GONZALO DOMÍNGUEZ Analista político
Ni manifestaciones ni negociaciones ni elecciones ni presión internacional. Mucho menos las intentonas militares con aire desesperado. Nada ha funcionado para la oposición venezolana, que hoy se muestra sin un as bajo la manga, desde que se puso al frente Juan Guaidó y lanzó la mayor apuesta contra el chavismo.
Ahora, a los opositores se les plantea el enésimo dilema: las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre. Partidos arrebatados a sus líderes y entregados a disidentes acusados de haberse dejado sobornar complican más el panorama.
Lejos queda aquel 23 de enero de 2019, en el que Guaidó juró en público el cargo de presidente interino, ajustado a una lectura de la Constitución que le permitía serlo por 30 días. Desde entonces, el fervor en las calles ha ido decayendo y, aunque todavía se percibe cierto afecto hacia él en la ciudadanía, no ha sido capaz de canalizar el descontento en multitudinarias manifestaciones que hagan tambalearse al Gobierno.