Vivanco: “Biden no tiene ninguna política para América Latina”
El director de la división para América de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, alerta del deterioro democrático en la región latinoamericana. Ayer inició un viaje por España para contactar con el Gobierno y tratar de que éste logre una mayor implicación europea.
“Si quieres que la Unión Europea se active e intente influir en la protección de los valores de la región, hay que hablar con España”, explicó.
Vivanco, residente en Washington, es muy crítico con el papel de la Administración de Joe Biden, quien, a su juicio, no ha definido aún una estrategia para la zona.
“Llevo desde los 80 trabajando en la defensa de Derechos Humanos y en 30 años no he visto la región en una situación tan difícil y con tantas amenazas al sistema democrático y los derechos humanos.
El diagnóstico que hacemos es amenazante. No sólo me refiero a dictaduras ya afianzadas, como Cuba, Nicaragua o Venezuela, sino a los líderes populistas que están proliferando en el resto, que tienen una retórica autoritaria que no se queda sólo en retórica. Creen que, una vez llegas al poder de forma electa, puedes gobernar como se te antoja”, señaló.
Fundamentó su crítica explicando que Nayib Bukele, el presidente de El Salvador, ha logrado en dos años lo que a Hugo Chávez le tomó casi 10, como el control del poder judicial, el control del Congreso o su decisión de cambiar la Constitución política.
Más adelante, Vivanco dijo que el Gobierno de Biden no tiene una política para América Latina, probablemente “a consecuencia de la crisis política que vive ese país, con la transición tan traumática del Gobierno de Trump y esa mayoría tan precaria con la que los demócratas cuentan en el Capitolio”.
“Guterres no existe en la región”
Consultado sobre el papel que desempeñan la ONU o la OEA, José Miguel Vivanco dijo que el secretario general de la ONU, António Guterres, no “existe en la región”, ni siquiera para los casos extremos.
“Guterres podría marcar diferencia, como lo hizo Kofi Ananan o Javier Pérez de Cuellar.
El caso de la OEA es aún peor, porque su situación es el reflejo de sus Estados miembros, y están dirigidos por Gobiernos que principalmente se aferran a este discurso populista, empezando por los gigantes de la región: Brasil y México”, sostuvo a tiempo de añadir que cuando “hablamos de comunidad internacional, quedan la Unión Europea y Washington”.