El Ejército de Israel toma el "control operativo" de Shejaiya, en la Ciudad de Gaza
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han anunciado haber tomado el "control operativo" total del barrio de Shejaiya, ubicado en la Ciudad de Gaza y escenario de cruentos enfrentamientos terrestres entre los militares y los milicianos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
Según detalla el Ejército en su página web, las FDI han completado el desmantelamiento de todas las "capacidades centrales" de Hamás en Shejaiya, y que sus militares seguirán llevando a cabo operaciones limitadas en la zona para destruir la infraestructura restante y acabar con los milicianos que aún queden con vida.
Durante estos combates con Hamás en Shejaiya, las tropas israelíes han logrado localizar y acabar con numerosos milicianos de Hamás, que respondieron abriendo fuego contra los militares o incluso detonando explosivos. Cerca de una decena de militares ha fallecido en las operaciones en Shejaiya.
Asimismo, durante las operaciones, el Ejército ha localizado decenas de túneles subterráneos bajo viviendas, escuelas o incluso instalaciones sanitarias. Todos estos túneles, así como los almacenes de armamento, han sido destruidos por las Fuerzas de Defensa de Israel.
Además, las tropas de la brigada Golani ha irrumpido en las viviendas de altos mandos de Hamás y han confiscado material de Inteligencia. La brigada blindada del Ejército de Israel, por su parte, ha logrado capturar el cuartel general del batallón Shejaiya de Hamás.
Durante esta ofensiva israelí contra el destacado barrio gazatí se produjo uno de los incidentes más destacados de esta guerra en Oriente Próximo. Uno de los batallones en Shejaiya mataron por error a tres de los rehenes israelíes tomados por Hamás durante su ofensiva del 7 de octubre, germen del actual conflicto.
Aquellos ataques de la milicia palestina contra territorio israelí dejaron un saldo de casi 1.200 muertos y otros 240 rehenes, y fue rápidamente respondido por las FDI, que lanzaron una cruenta contraofensiva que deja ya más de 20.000 palestinos muertos y más de 50.000 heridos.
