Oruro inicia festejo con entrega de estatua de la Virgen
Con la entrega de la monumental estatua de la Virgen María, de 45 metros de altura y 1.500 toneladas de peso, la mayor escultura religiosa de Suramérica, siete metros más alta que el Cristo Redentor de Río de Janeiro, Oruro inició ayer la celebración de los 232 años de su gesta libertaria y del Carnaval.
La imponente obra que representa a la Virgen del Socavón, patrona de los orureños, emplazada en uno de los cerros que rodean la ciudad, fue presentada por la alcaldesa, Rocío Pimentel, en un acto en el que el Nuncio Apostólico, Giambattista Diquattro, transmitió en una carta la “alegría” del Papa Benedicto XVI por la escultura.
“El Sumo Pontífice goza de que la imagen de la Madre de Dios y de la Iglesia pueda en su majestuosa belleza y solemne grandeza delinearse en el horizonte de Oruro como madre de todos aquellos que con noble y generoso compromiso buscan el desarrollo civil, humano, espiritual de esta ciudad y de Bolivia”, dijo Diquattro en su carta.
En el acto también participó el presidente Evo Morales, quien dijo estar impresionado por la dimensión del monumento y comentó que levanta la imagen del pueblo orureño y de su Carnaval que tiene rango de Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El secretario General de la Conferencia Episcopal de Bolivia, Eugenio Scarpellini, manifestó que “la figura de la Virgen es importante en nuestra vida católica cristiana, por ser la madre del Señor, es modelo de discipulado y discípula y misionera, esa es la gran belleza de la Virgen como tal”.
La imagen fue bendecida por párrocos de la Iglesia Católica de Oruro, quienes derramaron agua bendita por fuera y dentro de la monumental obra que surgió de la iniciativa de los vecinos y la Alcaldía de esa ciudad hizo suyo el proyecto. Su construcción llevó cuatro años y costó 1,2 millones de dólares.
El Carnaval en Oruro es la celebración religiosa más grande del país, comienza hoy con un concierto de todas las bandas que animarán el festejo
Ritmos de Carnaval ejecutados por una banda de músicos acompañaron la peregrinación de decenas de personas, conjuntos folklóricos y fraternidades hacia el cerro donde se alza la estatua.