La economía de Cochabamba
Apropósito de informaciones, en sentido de que Bolivia ostenta el mejor crecimiento económico de los países de la región, surge una inquietud natural de saber de qué economía se trata o cuánto corresponde a Cochabamba.
Según datos emitidos por instituciones especializadas, el crecimiento del PIB de Cochabamba entre el 2006 y 2014 es el más bajo del país. Si Bolivia en promedio alcanza el 5,1 por ciento de crecimiento, Tarija ocupa el primer lugar con 6,4 por ciento, Cochabamba se ubica en octavo lugar con 4,1 por ciento, sólo antes del Beni en último lugar, con 3,8 por ciento.
Cochabamba, según el tamaño de su economía o técnicamente en el volumen de su Producto Interno Bruto, en el periodo de 1998 al 2012 ocupó el tercer lugar y ahora está en camino de ocupar el cuarto lugar, después de Santa Cruz, La Paz y, recientemente, Tarija. Es decir, Cochabamba hasta 1998 había logrado ascender al 18,5 por ciento del PIB de Bolivia; el 2012 se redujo al 14,3 por ciento. Tarija, en el mismo periodo, del 4,8 pasa sorpresivamente al 13,6 por ciento.
El Ingreso Per Cápita que es el catalizador de las aspiraciones de bienestar de los cochabambinos, que se obtiene de la relación del PIB entre la cantidad de sus habitantes. En el periodo comprendido entre el 2006 y 2012, Bolivia alcanza a 2.023 dólares de ingreso per cápita, Tarija asciende a 4.260 dólares; Cochabamba se queda con 1.507 dólares, cifra que la ubica en el octavo lugar sólo después de Potosí, con 1.523 dólares.
Conforme publica el INE actualizado al 2014, logra posesionar a Bolivia con 3.200 dólares de ingreso per cápita; Cochabamba en sexto lugar con 2.536 dólares, destacándose Tarija, hasta ascender nuevamente al primer lugar, con 8.691 dólares.
Tal vez es pertinente recurrir a la opinión de especialistas de departamentos más prósperos que Cochabamba que atribuyen sus mejores ingresos per cápita a su propio esfuerzo y mayores regalías de hidrocarburos. En cambio, para Cochabamba, que cuenta con la refinería de petróleo con mayor capacidad del país, la desventaja estriba en que los combustibles que produce son subvencionados en el mercado interno; por lo tanto, estaría percibiendo regalías disminuidas, en relación a precios de exportación de gas y petróleo.
Como se puede apreciar, a la luz de tres indicadores económicos, Cochabamba se halla en camino de bajar del tercero al cuarto lugar, en su participación en la economía del país y, por otra parte, está siendo desplazado al octavo lugar en su crecimiento económico y eventualmente al sexto puesto en su ingreso per cápita.
Consecuentemente, Cochabamba está transitando a una economía regional poco alentadora y, por ahora, no se dispone de elementos de convicción suficientes, para predecir una mejor situación.
Es por eso indispensable acometer con energía un plan de organización económica del departamento; con miras a establecer, tal vez, una entidad de investigación y fomento para su desarrollo.
El autor es auditor financiero
