Oficina de correos y la eficiencia gubernamental
“..la eficiencia gubernamental o de las instituciones públicas estaba vinculada al grado de respuesta de la oficina de correos (institución pública)”…
Está científicamente demostrado que el nivel de eficiencia de una oficina de correos (agencia o institución pública) está directamente vinculada con el nivel de la eficiencia gubernamental. De esta forma, en un documento publicado hace algunos años atrás (Chong y colaboradores, 2014), por el cual estos autores enviaron cartas desde Estados Unidos a direcciones inexistentes en 159 países (10 cartas por cada país) con el objetivo de evidenciar si se devolvían las cartas al no conseguir la entrega y sobre todo medir los tiempos de respuesta como una medición relacionada de la eficiencia.
De esta forma, se remitieron correspondencias a empresas con nombres ficticios y direcciones inexistentes con nombres de economistas que han obtenido el Premio Nobel (Ej. Av. Milton Friedman N° 254.000), bajo el rótulo: “Favor devuelva la correspondencia al remitente en caso de no ser entregada a destino”.
El resultado fue una devolución del 60% de las cartas no entregadas, en un plazo promedio de seis meses. Lo interesante de este estudio consistió en señalar que la eficiencia gubernamental o de las instituciones públicas estaba vinculada al grado de respuesta de la oficina de correos (institución pública).
Los países que evidenciaban 100% en la devolución de la correspondencia no entregada se encontraban: Estados Unidos, El Salvador, República Checa, Luxemburgo, Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda, Uruguay, Canadá y Barbados. Algunos de los países con 0% en la devolución, se señalaba a la Federación Rusa, Panamá, Camerún, Ghana, Tanzania. Bolivia estaría dentro de los países de bajos ingresos con respuesta baja (inferior al 50%).
Una de las conclusiones de la relación en la calidad de la oficina de correos y la eficiencia gubernamental se basa en la relación de la baja productividad pública, la calidad gubernamental, así como la percepción de elevados niveles de corrupción. En perspectiva, las instituciones sí importan y se las puede medir de distintas maneras.
Columnas de ROGER ALEJANDRO BANEGAS RIVERO