Urea y los acuerdos con la rusa Acron
Como es de conocimiento público, la construcción de la planta de urea en la localidad de Bulo Bulo dio un paso hacia la muy demandada industrialización del gas natural en Bolivia. Nunca estuvimos de acuerdo con la localización de la planta, sobre todo por la dificultad de acceso a los mercados internacionales (Brasil y Argentina) para los productos terminados, por limitaciones a fuentes de abastecimiento de gas natural de largo plazo (todos los campos en el norte de Bolivia están en declinación) y factores de acceso a materias primas, mantenimiento y otros. Siempre manifestamos que Puerto Suárez era el lugar óptimo para anclar esta planta.
En fin no debemos llorar sobre leche derramada y la ubicación es ya historia. Ahora el derrotero es lograr que la planta opere a un mejor nivel de capacidad para la cual fue diseñada, de manera que se puedan cubrir costos de operación y mantenimiento y lograr la recuperación de inversión de capital de cerca de mil millones de dólares.
Según los datos a los que tenemos acceso, la planta ha exportado entre noviembre de 2007 y febrero de 2019 (IBCE) a una capacidad promedio de 596 toneladas por día (TPC) y el mercado interno ha demandado 86 TPD (YPFB). Es decir suma un total promedio de 682 TPD, logrando una capacidad de producción de 31% respecto del total instalado de 2.200 TPD. Esto de ninguna manera es suficiente para lograr la recuperación de costos OPEX (operativos) y Capex de (capital). La capacidad de producción debe llegar a cerca del 85 a 90% incluyendo paros programados.
De ahí que la asociación de YPFB con Acron, una empresa privada rusa, estructurada como sociedad anónima y que cotiza en las bolsas de Moscú y Londres, puede ser un camino que lleve a elevar y afinar las exportaciones desde Bolivia, situación que no ha podido lograr YPFB. Acron es una empresa integrada, líder en producción, en Rusia y China, de nitrato de amonio y otros componentes nitrogenados, incluyendo urea. Tiene una gran red de comercialización y logística de distribución a nivel global.
Acron ya comercializa sus productos en América Latina desde hace varios años. En los primeros meses de 2018 abrió una oficina comercial en Brasil para reforzar su posición sobre todo comercial. También, según entendemos, continúa negociando la compra de dos plantas de Petrobras (incluidas en el proceso de privatización). Ellas son la de Araucaria Nitrogenados S.A. (Ansa) y Unidad de Fertilizantes Nitrogenados III (UFN-III), una que está en operación y otra que está con avance de construcción de 85%, ambas para producir amoniaco y urea.
Es por esta razón que YPFB ha firmado con Acron un acuerdo/contrato para futuro suministro de gas natural hasta 2,2 Millones de Metros Cúbicos Día MMMCD (7,3% del contrato de 30 millones que aún se tiene con Brasil y que están prestos a concluir en 2020). Se señala que el inicio de suministro sería a partir de 2023. Nos imaginamos que los precios finales y demás condiciones del contrato se establecerán cuando se esté cerrando el proceso de compra de las plantas de Petrobras por parte de Acron.
Vamos a cruzar los dedos de las manos y de los pies, para que Acron sea muy en breve una solución a la problemática comercial de la planta de urea, para así levantar exportaciones en beneficio de YPFB y de acortar nuestra balanza comercial.
El autor fue ministro de Hidrocarburos de Bolivia y actual socio director de Gas Energy Latin America
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