La urgente innovación en Bolivia ante la Covid-19
La crisis del coronavirus está afectando al mundo de tal manera que varios sectores serán perjudicados para siempre. Es difícil concebir que retornaremos a la normalidad, lo que nos espera es una nueva normalidad en la cual la ecología de medios será muy diferente a la que estábamos acostumbrados antes de la cuarentena, y esto es algo positivo si lo incentivamos.
Si bien la brecha digital en nuestro país es amplia, nos estamos viendo obligados a adaptarnos rápido a nuevas tecnologías. Que en Bolivia tengamos 7,50 millones de conexiones a internet no quiere decir que todos los que estamos conectados sepamos aprovechar este recurso. Estamos lidiando con dificultades que no existen en otros países; no podemos hacer pedidos por internet, acceder al voto electrónico o concretar estudios online.
El distanciamiento físico fortaleció prácticas en otros lugares donde hacer compras y efectivizar transferencias bancarias se hace virtualmente como parte del cotidiano. Pero, ¿qué pasa en Bolivia, donde estas transformaciones digitales se vuelven necesidades de golpe y en plena pandemia?
Tanto políticas públicas y usuarios debemos adaptarnos y tomar como ejemplo lo que se está haciendo afuera para anticipar soluciones; pensar en cómo regularizar la entrega de productos en casa, cómo facilitar un sistema financiero virtual, cómo ayudar a productores a vender por internet, etc. Se pueden generar innúmeras fuentes de trabajo al digitalizar nuestra cotidianidad, más movimiento económico y más ventajas sociales.
La flexibilidad de espacios laborales también nos está dando una lección sobre productividad.
Estamos experimentando masivamente el trabajo por objetivos y empezando a contemplar la efectividad del “home office”. El sector de servicios (educación, bancos, oficinas públicas, comercio) se encuentra ante la oportunidad de una gran revolución. Pero ¿qué pasa con el 35% de nuestra población que no tiene acceso a internet?
La crisis incentiva la innovación, pero debemos darle recursos para surgir. Debemos apoyar cualquier idea que beneficie a la sociedad, porque en nuestro país nacerá ante una necesidad en la cual estamos priorizando la vida ante todo. La ecología de medios permite la sobrevivencia de aquél que se adapta, y acá la selección natural hará que domine la innovación (de golpe y en plena pandemia).
Docente universitaria y estratega de comunicación
Columnas de SELENE PINTO OLIVERA