Más incertidumbre sobre el inicio de clases
Hace poco menos de dos semanas, constatábamos que el inicio del año escolar 2021 era incierto y atribuíamos esa condición al avance de la pandemia. Hoy, a 11 días del hipotético primer día de clases para cerca de tres millones de niños y adolescentes bolivianos, esa incertidumbre es mayor, pues a las complicaciones de la creciente crisis sanitaria se suman dificultades de índole esencialmente educativa y organizacional.
En efecto, para comenzar, las inscripciones en unidades educativas –que se iniciaron de manera oficial anteayer, lunes– están marcadas por una serie de cuestionamientos de diferentes sectores que van desde cómo registrarán a sus hijos los padres de familia que no tienen acceso a Internet, hasta las exigencias extraordinarias de establecimientos privados que el Ministerio de Educación intenta moderar, cuando tuvo que haberlas previsto con antelación y, en consecuencia, haber emitido determinaciones que eviten los posibles abusos.
Y en las unidades educativas estatales, “hay padres de familia que no están de la mano de la tecnología, no tienen acceso a Internet, no saben manejo de redes; entonces, ¿cómo se realizará el proceso de inscripción, si se definió registro a través de plataformas?”, señalaba un docente.
Ayer, el Ministro de Educación anunció que ampliarán la etapa de inscripción escolar para los estudiantes nuevos, debido al feriado del viernes 22 por el Día del Estado Plurinacional. Pero no dijo hasta cuándo. Y tampoco parece necesaria esa precisión, pues es poco probable que las clases ccomiencen el lunes 1 de febrero –como insiste en afirmar esa autoridad– debido a que los maestros urbanos no garantizan el inicio de labores escolares.
“Hemos hecho un planteamiento básico, el Gobierno debe garantizar las condiciones y debe garantizar el presupuesto, pero hemos sido sorprendidos con (…) que no va a destinar ni un solo centavo para el reinicio de las labores educativas, por esa razón hemos roto el diálogo”, señalaba ayer un dirigente del magisterio paceño, al anunciar que una instancia nacional determinará movilizaciones.
Y los reclamos del magisterio no son pocos. La Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia observa que seis temas “importantes para avanzar en la calidad educativa (...) hoy ya no están” en las determinaciones del Ministerio y denuncia la ausencia de un presupuesto que garantice las clases a distancia.
Así, es evidente que los anuncios ministeriales sobre el inicio del año escolar no están cerca de concretarse. La evidente improvisación en la preparación de la gestión escolar del “Año del Derecho a la Educación” recuerda los anuncios repetidos y vanos del Ministro de Educación del Gobierno transitorio.
