Sistema previsional: inversión y crédito
El ahorro previsional tiene relación directa e impacto en el multiplicador del ingreso a través del enfoque de inversión estudiada en viabilidad, gestión de riesgos y retroalimentación de la fiabilidad interdisciplinaria, asegurando la capitalización sostenible del sistema en el marco de la eficiencia que proporcione suficiencia de ingresos para la cobertura de las necesidades propias de la vejez de sus aportantes. Asimismo, posibilitando la disminución de la desigualdad social, por el impulso del trabajo diversificado, que disminuya en el devenir del tiempo, el subsidio solidario, considerando el marco de la transparencia y eficiencia administrativa, otorgando una renta de jubilación que pondere la capitalización individual asociada al nivel de ingreso que depende de su formación, competencia, rendimiento y productividad laboral.
Diversificar la economía, implica analizar la inversión del ahorro previsional, pero también, ampliar la posibilidad de otorgar créditos a los trabajadores aportantes, en consideración de tasas blandas y una temporalidad prudente. El crédito razonado, podría dinamizar la estabilidad familiar y, por ende, la generación de ingresos y beneficios significativos.
El dinero constituye “la sangre de la economía”, recordando que su activación depende de la actuación empática de los agentes económicos, considerando el cumplimiento de sus roles, aportando al desarrollo endógeno y evitando la incongruencia asociada al modelo primitivo, con accionar de la economía informal coligada a la economía cuestionada, pero en muchos casos asimilada.
Si nos enfocamos en las posibilidades de inversión, debemos gestar una organización industrial que aproveche el ahorro previsional con la finalidad de consolidar crecimiento de largo plazo, considerando la calidad de la producción nacional vinculada a procesos de integración subnacional y supranacional traducidos en resultados y externalidades favorables.
Sin embargo, es importante destacar que el ahorro previsional, es insuficiente ante los niveles requeridos de inversión, aspecto que plantea la modificación de la norma vigente, para que, los trabajadores aportantes, accedan a créditos para consumo, vivienda e inversión productiva, frenando de esta manera, la desviación significativa que tiene la irregularidad de la intermediación financiera.