Argentina: liberan a boliviano detenido por llevar hojas de coca en su vehículo
BUENOS AIRES / LOS TIEMPOS
Ansiedad, alegría y victoria sintió la familia Zurita Delgadillo hoy después que su hijo José Luis Delgadillo Zurita (28) salió "casi" libre del Complejo Penitenciario Federal II Marcos Paz, una cárcel de máxima seguridad en Buenos Aires. El joven fue detenido por llevar hojas de coca en su vehículo.
"No se halló en poder del imputado elementos de corte, de acondicionamiento o precursores químicos que den cuenta que la hoja de coca iba a ser usada para la fabricación de estupefacientes. Tampoco se encontró en los celulares algún indicio de actividad ilícita", explicó el abogado, Federico Ravina, con respecto a los elementos valorados por la Cámara Federal antes que definiera la "falta de mérito" en el caso.
El 25 de agosto personal del Departamento de Prevención Barrial de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, encontró en el auto particular de Delgadillo 35 kilos de hoja de coca que llevaba a La Plata para consumo de su familia de 12 personas quienes trabajan en la producción de hortalizas en las quintas, pero en este caso iban a usarla para celebrar la fiesta de la Virgen de Urkupiña.
Delgadillo estuvo detenido de forma preventida por al menos 39 días antes que lo liberaran. Su familia desesperada pidió ayuda a organizaciones sociales de pueblos originarios, movimiento ciudadanos en Argentina y a otros migrantes bolivianos, quienes realizaron varias protestas. La última frente al Tribunal de Justicia con un pijcheo comunatario y k'oa.
Ravina afirmó que, en adelante, sumará mayores elementos de prueba para desvincular a su cliente del proceso. "Lo de José Luis no es un tema aislado. Esto va para largo. Ahora hay tranquilidad porque logramos sacarlo. Realmente hay un cambio de época y se debe instaurar que la hoja de coca no es cocaína", agregó.
Entre tanto, en la Universidad de La Plata, donde estudia José, surgió la propuesta de armar una cátedra libre e itinerante que hable de costumbres y pueblos originarios para salvaguardar el pijcheo y generar el respeto a prácticas culturales y costumbres de migrantes.