Gobierno asegura que el patrimonio misional está a salvo del fuego
Las misiones jesuíticas de la Chiquitania boliviana, declaradas patrimonio por la Unesco, no han sido afectadas por los incendios en esa zona en el este del país que han arrasado con cientos de miles de hectáreas de bosque y pastizales, informó hoy una fuente oficial.
"Reportes al 30 de agosto indican que no tenemos daños ni a sitios patrimoniales, ni turísticos, igualmente ningún parque o reserva nacional de la Chiquitania han sido alcanzados o afectados por los incendios", sostuvo la ministra de Culturas y Turismo, Wilma Alanoca, citada en un comunicado de su oficina.
Los incendios afectaron el flujo turístico hacia el municipio de Roboré, en la región oriental de Santa Cruz, que espera que los turistas reactiven sus viajes a esa zona, señaló la ministra.
El lugar cuenta con cuatro ejes turísticos que son Roboré y sus alrededores, Chochís, Aguas Calientes y Santiago, ningunos de ellos alcanzados por el fuego, sostiene la nota del ministerio.
"Reportes indican que durante el incendio el flujo turístico hacia la Chiquitania bajó en 60 por ciento. Las empresas turísticas han reanudado viajes y servicios porque las zonas turísticas no han sido afectadas", insistió la ministra.
Alanoca, junto al viceministro de Turismo, Marcelo Arze, y el director regional del ministerio en Santa Cruz, Daniel Zeballos, se reunieron el jueves con representantes de diversos gremios relacionados con la actividad de turismo y hospedaje para informarles sobre las acciones gubernamentales contra los incendios.
Las autoridades también escucharon las sugerencias y consideraciones del sobre el tema, según el comunicado.
La Chiquitania cruceña, un lugar de transición entre la Amazonía y el Chaco, es una de las principales zonas turísticas de Bolivia donde están asentadas las misiones jesuíticas reconocidas en 1990 como Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
En la zona, que comprende varios municipios cruceños, se desarrollaron especies que han formado el llamado bosque seco chiquitano, acostumbrado a subsistir en un clima sin lluvia que predomina por varios meses al año.
El Gobierno nacional ha reportado más de 700.000 hectáreas afectadas por los incendios registrados desde principios de mes en la Chiquitania boliviana, aunque las autoridades departamentales cruceñas aseguran que el daño supera el millón de hectáreas.