Voluntarios: “Es la primera vez que nos sentimos intimidados, seguidos”
Llegaron con intención de ayudar a sofocar los incendios en la Chiquitanía y, en respuesta, encontraron vigilancia e intimidación por parte de algunas personas, presuntos colonos de la zona, que rondaban y los vigilaban por las zonas afectadas, según detallan los bomberos voluntarios.
Los voluntarios consultados por este medio —dos extranjeros y uno nacional— señalaron que se sintieron temerosos y perseguidos, y ratificaron que hallaron indicios de que personas de la zona reactivaban los focos de quema que los bomberos apagaban, como se vio en videos difundidos en redes sociales.
“Es la primera vez que nos sentimos muy intimidados para trabajar, nos sentimos seguidos. No fue tan bueno trabajar bajo presión”, aseguró un bombero del extranjero que pidió no ser identificado.
El voluntario, que trabajó en la zona de Concepción, señaló que “no teníamos camión bombero para movilizarnos, fue todo improvisado. Sin la ayuda de (algunos de) los comunarios y sin la ayuda de las personas en Santa Cruz, nuestro trabajo hubiera sido mínimo”.
El extranjero señaló que no es la primera vez que trabajan en este tipo de situaciones, por lo que prevén con qué panorama se encontrarán; sin embargo, les resultó “frustrante” que algunas personas hayan seguido sus acciones de cerca.
Otro de los voluntarios extranjeros señaló que había gente que se “incomodaba con ellos” y que habían algunas personas que los seguían. “En Concepción había una señora que estaba al tanto de qué hacíamos, dónde íbamos”, aseguró.
El mismo confirmó que hallaron algunos indicios que les hacían sospechar de la provocación de nuevos focos de calor.
Si bien en algunos casos se tuvo una vigilancia a los voluntarios, en otros, los comunarios ayudaron a los bomberos a sofocar los incendios. Uno de los voluntarios bolivianos, Mario Aranibar, también señaló que vieron personas que sólo observaban las acciones y luego se retiraban del lugar, sin preguntar nada.
“El gran problema es que no sabemos si son comunarios o quienes, bajo la imagen de gente que quiere ayudar, está metida ahí. Nosotros (por el SAR Bolivia) hemos trabajado bien con los comunarios, a nosotros no nos han perseguido, pero también otros grupos nos han comentado que no los dejaban ni a sol ni a sombra”, detalló.
Aranibar también hizo referencia a que se encontraron con algunos indicios que apuntan a que los incendios son provocados.
El voluntario aseguró que el último día que estuvieron en la zona encontraron un punto donde se usó la corteza de un árbol para prender fuego.
“Había gente que llegaba, nos miraba y se iba, personas que daban una vuelta a la plaza, sacando fotos, mirándonos y después desaparecían. En un principio, para nosotros no tenía importancia, pero en los últimos días, cuando vimos que habían bardas con alambre de púas dividiendo los terrenos, nos sorprendimos”, afirmó.
“SEGUIMOS, MIENTRAS NOS DÉ LAS FUERZAS”
El responsable del SAR Bolivia, Bernardo Aranibar, señaló que en lo que respecta a los voluntarios que ingresaron a la zona afectada, ninguno está regresando a sus ciudades de origen pese a que conocen la situación de la provocación de nuevos focos de incendio.
“Del SAR Bolivia seguimos en la zona, seguimos trabajando. Pienso que mientras nos dé las fuerzas vamos a seguir apagando, aunque otros estén encendiendo. Es frustrante, es cierto, pero si dejamos que se queme, es muy complicado”, señaló.
Según dio a conocer, 57 voluntarios están en la localidad de Palestina, en Concepción.