Especialistas ven viable que Áñez llame a elecciones y designe vocales
Especialistas indican que existe la posibilidad jurídica para que la presidenta Jeanine Áñez designe a los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y llame a elecciones mediante decreto supremo, como ocurrió en la crisis de 2005. Mientras, los parlamentarios del MAS convocaron a sesión hoy para tratar las renuncias de Evo Morales y Álvaro García Linera y las nuevas elecciones.
Ante la renuncia y aprehensión de vocales del TSE, se baraja la posibilidad que Áñez emita dos decretos supremos. En el primero tendría que hacer la convocatoria a elecciones y en el segundo la designación de vocales.
Según la Ley 018 del Órgano Electoral, es la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) la que debe seleccionar a seis de los siete vocales del TSE a través de una convocatoria y elección. Esto podría demorar más de 45 días.
Empero, Bolivia está en emergencia debido a 23 fallecidos producto de los enfrentamientos. Esta situación da pie a que Áñez pueda emitir los decretos. El expresidente Jorge Quiroga presentó dos borradores como propuesta para que la Presidenta los utilice.
“Dada la situación de conflicto se puede designar (vocales) mediante decreto supremo. El 2005 hubo una situación similar. También el mismo expresidente Morales designó mediante decreto a otros cargos acéfalos.
Es necesario hacerlo de manera inmediata para llegar a la pacificación”, expresó el constitucionalista William Bascopé.
El expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé emitió los decretos supremos 28228 del seis de julio de 2005 y el 28429 del 1 de noviembre del mismo año. En el primero convocó a comicios y en el segundo designó a los vocales, luego que la ALP no se puso de acuerdo en la elección.
Años después, el expresidente Morales mediante decretos supremos designó a personas en cargos que debían ser elegidos por la ALP. Un ejemplo es el Decreto Supremo 432 del 17 de febrero de 2010. A través del cual nombró a ministros de la Corte Suprema de Justicia y magistrados del Tribunal Constitucional.
Cuando se aplicaron estos decretos se generó jurisprudencia, indica en su propuesta Quiroga. Señala que el artículo cuatro del Procedimiento Constitucional establece que se presume constitucionalidad en tanto el Tribunal no declare lo contrario.
En este sentido, Bascopé dijo que el Tribunal Constitucional podría validar lo que haga Áñez.
Mientras, los presidentes de las cámaras de Diputados y Senadores de la ALP convocaron a sesión para hoy a las 15.00. Se tratará la convocatoria a nuevas elecciones y las renuncias de las autoridades del saliente gobierno.
“Lo importante, ahora, es cuidar el bien mayor que es tener nuevas elecciones para pacificar el país”, dijo Bascopé.
TSE NECESITA TENER A SIETE VOCALES
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) debe estar conformado por siete vocales, seis elegidos por la Asamblea Legislativa Plurinacional y uno designado por el primer mandatario.
De los siete vocales, al menos dos deben ser de origen indígena originario campesino. Asimismo, tres tienen que ser mujeres. Y es importante que no tengan afiliación político-partidaria, según establece el artículo 12 de la Ley 018 del Órgano Electoral Plurinacional.
LA IDONEIDAD EVITARÁ UNA SUSCEPTIBILIDAD PROFUNDA
REDACCIÓN CENTRAL
Los diferentes escenarios para la designación de vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) pueden generar susceptibilidad en los sectores de la población. En caso que se haga por sesión de la Asamblea
Legislativa Plurinacional es posible que se cuestione la idoneidad, pues la ALP tiene dos tercios de representantes del MAS.
Mientras la figura puede ser al revés en caso que sea la presidenta Jeanine Áñez quien haga las designaciones por decreto supremo.
“La designación directa vía decreto supremo debe contar con legitimidad o sea con consensos importantes en el ámbito de la sociedad civil. Estas designaciones, además tendrían que recaer en personas probas e idóneas, sin antecedentes político-partidarios”, observó el abogado y politólogo, Rolando Tellería.
El profesional observa que sólo mediante el consenso y la designación de personas idóneas se podrá dar la mayor legitimidad a la designación de vocales del TSE para las nuevas elecciones.