Longaric asegura que el Gobierno tiene el respaldo de embajadores de la UE
La canciller, Karen Longaric, informó hoy que embajadores de la Unión Europea (UE) mostraron su respaldo al gobierno transitorio de Bolivia tras los impases diplomáticos con España y México.
La autoridad contó que en la reunión sostenida con los representantes de la UE se explicó las consideraciones de Bolivia para declarar personas non gratas a funcionarios diplomáticos.
“(Hubo) atención, comprensión del verdadero alcance de los hechos y finalmente el respaldo de todos y cada uno de los embajadores de la UE. Fue una reunión satisfactoria, se despejaron muchas dudas en relación de los hechos, pero fundamentalmente en las razones que llevaron a Bolivia a decidir declarar personas no gratas a los funcionarios diplomáticos de España”, aseguró Longaric en contacto con la prensa.
Además aseguró que la decisión de declaración de personas non gratas a los diplomáticos se acoge a la ley y normas de Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas. Y dicha decisión no afectará a las relaciones entre países.
“Hemos actuado conforme a la ley, no nos hemos salido ni un milímetro de lo que la ley nos faculta hacer. La declaratoria ha sido retirarle la confianza a un funcionario diplomático, lo que no implica afectar las relaciones con su país”, ratificó.
La reunión fue convocada por la Cancillería después de que los representes de la UE expresaran su preocupación por la expulsión de diplomáticos españoles, medida que se calificó como "inamistosa".
El pasado 27 de diciembre de 2019, miembros del Grupo Especial de Operaciones (GEO) español, una unidad de élite que se encarga de la protección de diplomáticos, intentaron ingresar a la residencia mexicana encapuchados, aduciendo que estaban acompañando a dos altos diplomáticos españoles en una “visita de cortesía” a sus pares mexicanos.
La residencia mexicana acoge alrededor de una decena de personas a las que el Gobierno interino de Bolivia acusó ante la Justicia de varios delitos, entre ellas algunos antiguos ministros de la etapa del expresidente Evo Morales procesados por acusaciones como terrorismo y sedición.
A partir de ese momento, se generó una crítica tensión entre España y Bolivia que derivó en la expulsión de la embajadora de México, María Teresa Mercado; a los diplomáticos españoles Cristina Borreguero y Álvaro Fernández, además de a un grupo de policías españoles del GEO.