Bolivianos en Argentina hacen filas para empadronarse y denuncian irregularidades
Karen Carrillo Florero / Los Tiempos
Cientos de residentes bolivianos hacen filas en el Consulado en Buenos Aires, Argentina, para realizar el trámite de empadronamiento en el marco de las elecciones generales del 3 de mayo.
Muchos acudieron desde la madrugada y hasta la tarde no fueron atendidos. Denunciaron que el sistema para realizar el empadronamiento es obsoleto y que la cantidad de funcionarios es mínima con relación a los residentes que intentan hacer el trámite.
Desde el Consulado anunciaron que atenderán a todos los residentes bolivianos, pese a que el horario es de 8:00 a 16:00.
Tras la hora de cierre de esas oficinas, la fila conformada por cientos de bolivianos permanecía. El Consulado informó que brindará atención a puertas cerradas, pero exclusivamente para el trámite de empadronamiento.
- TENSIÓN
"Abran la puerta, abran la puerta, solo salí a comprar algo para mi hijo. Tengo la ficha con el número que me dieron", grita Angélica Ugarte en puertas del Consulado General de Bolivia en Buenos Aires sujetando con una mano a su hijo de 9 años y con la otra, la ficha número 619.
Ella viajó una hora desde Lomas de Zamora para hacer el cambio de domicilio que le habilite a votar en las elecciones del 3 de mayo para elegir a las nuevas autoridades nacionales en Bolivia.
"Ya estaba adentro con ficha y mi hijo me dice: 'mamá tengo hambre'; salgo a comprar un pancho y al volver la puerta ya estaba cerrada. Me dijeron que vuelva mañana, pero no puedo porque tengo que cuidar a mis hijos, tengo que trabajar", afirma desesperada después de esperar ocho horas para empadronarse sin suerte.
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Jorge, residente cochabambino en Argentina, lamenta que luego de nueve horas le cerraran la puerta sin dar ninguna información a pesar que un funcionario del Consulado afirmara que se atendería "hasta el último de la fila". Él recorrió más de 58 kilómetros desde La Plata. "No sé si pueda volver mañana porque perdí el día de trabajo", indica desesperanzado.
Esta semana, las largas filas, la desorganización, los gritos y la falta de información fueron el común denominador en el registro biométrico de los residentes bolivianos que llegan a empadronarse hasta ambientes del Consulado General de Bolivia en Buenos Aires.
Hoy a pesar de tener las puertas cerradas con resguardo policial al interior, algunas personas esperaron unos minutos más "por si acaso"; otros decidieron no perder más tiempo e irse; y, en su desesperación, otro grupo optó por hacer una lista para ver si les podían atender. No fue así.
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"Yo me pasé varios días haciendo el trámite para ayudar a empadronar a toda mi familia. Es un quilombo acá", lamentó Lesly Cabrera quien observaba lo que ocurría.
El 18 de enero el Órgano Electoral Plurinacional (OEP) en Buenos Aires inició el empadronamiento en instalaciones del Consulado de Bolivia en Argentina (zona de Once) y en el Viceconsulado de Bolivia en La Matanza.
A diferencia del anterior periodo, se vieron rebasados por la cantidad de gente que acude para registrarse. Pero, ¿qué motiva a los residentes bolivianos en Argentina a exigir empadronarse?
"Nuestro voto va a tener peso y va a tener incidencia en lo que pueda pasar o no en Bolivia. Antes la gente no se sentía tan motivada, pero pasan cosas malas y uno ante las injusticias reacciona", responde Cabrera que ayudó a empadronar a seis de los diez miembros de su hogar.
Entre tanto, los residentes bolivianos que no corrieron con la misma suerte, piden extender el tiempo para empadronarse o que se disponga de mayor personal para que se atienda a todos, aunque mañana y el domingo, son los últimos días para su habilitación a las elecciones presidenciales, de 08.00 a 16.00, según el comunicado oficial del OEP.
