Periodistas confirman situación dramática en el Beni

Ante la falta de médicos especialistas, protección personal de bioseguridad, escases de respiradores, insumos, etc., se ha marcado una tragedia sanitaria en el departamento del Beni a causa de la pandemia del coronavirus. Periodistas de la ciudad de Trinidad consideran que la ayuda que ha llegado en estos últimos días no es suficiente y aseguran que en el cementerio COVID hay más de 200 muertos y no así 77 decesos a nivel departamental como reportan las cifras oficiales.

Los periodistas de Trinidad Roció Hanssen, Mariela Ojopi y Ricardo Gutiérrez participaron de un conversatorio online organizado por el diario Los Tiempos. Beni es el segundo departamento más golpeado con casos de coronavirus en el país. Según cifras oficiales, hasta el momento se tiene registrados 1.242 casos. A nivel nacional son 7.136 y 274 decesos en total.

“No tenemos las condiciones sanitarias ni los centros hospitalarios habilitados ni equipados para personas que llegan y necesitan respiradores, oxígeno. No tenemos prácticamente nada”, expresó Hanssen. La periodista se contagió de coronavirus en una de sus coberturas al hospital Germán Busch y actualmente se encuentra aislada y en proceso de recuperación.

Hanssen agregó que “hay mucha gente que necesitan respiradores, no sé cuántos están funcionando, se habla de entre nueve y 11 y al final es una incertidumbre. El lunes murió un artista beniano porque no había ni un respirador en el hospital Germán Busch y al llevarlo a otro hospital no pudo resistir”, dijo.

La periodista dijo que la ayuda del gobierno central no es suficiente. “Poco a poco están llegando equipos, las autoridades nacionales están llegando, pero no es suficiente, falta más ayuda, falta más atención y más rápida. Hay gente que está muriendo en horas, no en días, entonces la ayuda tiene que ser oportuna”, expresó.

La profesional aseguró que la cifra de decesos en esa región es alarmante: “en el cementerio COVID hay cerca de 200 muertos, entonces es una cifra muy alarmante y situación muy penosa. En mi misma familia he tenido que ver morir a cuatro personas, ahora me entero que ha fallecido un tío también”, relató.

Falta de equipamiento

Mariela Ojopi, por su parte, señaló que varios médicos se aislaron y se han visto afectados por la falta de equipos.

“En la semana del primer caso, el hospital German Busch perdió al 70% de su personal, es decir, médicos, enfermeras, ambulancias, limpieza, cocina. Se quedó con un 30%, que no abastecía porque ya la gente empezó a complicarse y se empezó a saturar el hospital.

Los bomberos se están reincorporando en el trabajo de ambulancias porque 10 de ellos se vieron también afectados por sospecha de coronavirus y se aislaron, contó.

Ante la preocupante falta de personal salud, contó el testimonio trágico de las enfermeras. “Varias de ellas me dieron sus testimonios, están yendo a trabajar en los centros COVID y ya tienen el virus, pero en el momento que tienen libre, descansan y se hacen su tratamiento, para después reponerse y poder seguir atendiendo a las personas que lo necesitan”, aseguró.

Ricardo Gutiérrez se refirió a la falta de presupuesto para equipamiento e infraestructura. “Recientemente logré ingresar a los datos de la última gestión de la gobernación y había un presupuesto de 13 millones de bolivianos para el sistema de salud. De esa cantidad, 12 millones y medio era para salarios y medio millón para pago de servicios, como luz y agua, o sea no había presupuestos ni para equipamiento ni para infraestructura”, relató.

“El sistema de salud ha colapsado totalmente, ante la crisis por esta enfermedad”, agregó.

Sordera epidemiológica, falta de información

Hanssen manifestó que se necesita indagar sobre lo que está sucediendo y contó que las autoridades le negaban la información que ella requería.

“Yo tenía cierto rechazo por parte del director del SEDES y el epidemiólogo de esa entidad porque todos los días le preguntaba si no hay reporte de personas sospechosas y siempre me evadía las respuestas”, contó.

Ella se contagió de coronavirus al realizar cobertura periodística. “Cuando empezamos con la tragedia sanitaria sabíamos que estábamos 1005 expuestos al contagio de esta enfermedad. Para mí ha sido bastante duro sobrellevar esta situación ya que me contagié del virus en el Germán Busch haciendo una cobertura cuando se decía que no había ninguna persona positiva, y en la noche murió el primer paciente y ahí empezó todo”, contó.

Agregó que debido a la falta de protección, como trajes de bioseguridad, casi todos los médicos y enfermeras se contagiaron rápidamente. “Es por eso que colapsó de entrada el sistema de salud en esta región”, dijo.

Ojopi agregó que aún no se conoce al “paciente cero” de Beni; “en el silencio epidemiológico tal vez fueron contagiando sin querer porque no sabían que lo tenían hasta que se conoció los primeros dos casos y murió una persona, a los días comenzó la explosión de casos”.

A su vez, Gutiérrez contó que en una entrevista a un médico le dijo que en Beni no había silencio epidemiológico, era una “sordera epidemiológica”. Según él, hubo exceso de confianza en las autoridades y también en el periodismo.

Al igual que Hanssen, Gutiérrez considera que se debieron cuestionar más las estadistas de cero casos en ese departamento, que se registró durante semanas.

“Debimos cuestionar más la versión oficial, debimos preguntar e insistir más porque no nos respondían a lo poco que preguntábamos, debimos ser más cargosos y molestosos, porque lastimosamente lo que estamos viendo ahora nos es cosa de dos casos y dos semanas. Creo que sí hubo una serie de errores que no se supieron sopesar y hoy estamos viviendo un desastre”, relató Gutiérrez.

Ojopi también señaló que cuando se presentaron los casos reportados y decesos, en los centros de salud no querían dar reportes. “Murió una persona con los síntomas del virus y en el hospital Obrero hubo un abandono porque las autoridades no querían hablar, no nos respondían”.