Pesar en el mundo del arte por la partida del maestro Ernesto Cavour
Este domingo, el maestro del charango Ernesto Cavour Aramayo falleció a sus 82 años y su partida causó profundo pesar en el mundo artístico. Con trayectoria nacional e internacional, fue uno de los mejores ejecutores del charango.
De acuerdo con su datos, Cavour nació un 9 de abril de 1940 en la ciudad de La Paz, fue músico charanguista, cultor de la música andina y fue muy conocido por ser inventor de varios instrumentos. Por esto, creó un museo con más de 2.000 instrumentos de su colección personal, así como también los fabricados por él.
Innovador
El artista, cultor e innovador de los instrumentos nativos experimentó en la elaboración y producción de elementos de cuerda, entre ellos, la guitarra muyu muyu.
La guitarra muyu muyu, que significa vuelta-vuelta en aimara, consiste en dos guitarras unidas por su parte trasera y separadas por un tabique que deja a cada lado las cajas de resonancia. Una de ellas tiene seis cuerdas tradicionales, mientras que la otra 12 cuerdas de nylon para producir un sonido más especial. Este instrumento cuenta con dos clavijeros, y fue uno de los que mayor popularidad logró.
Cavour creó también las zampoñas cromáticas de dos filas, con 25 tubos en total, ofreciendo un instrumento diferente y muy innovador que pronto se hizo un hueco en la música tradicional del país. En el Museo del Charango se pueden ver muchos de sus instrumentos creados por él.
En 1962 creó el primer Museo del Charango, que en 1984 amplió la variedad de instrumentos y fue refundado como Museo de Instrumentos Musicales de Bolivia.
“Walaycho” y bullanguero
Cavour escribió en uno de sus textos que “el charango es el más ‘walaycho’ y bullanguero de esta tierra. Tiene una memoria increíble que la haría titubear al mismo cerro que ha visto pasar al tiempo. El charango puede ser un quirquincho al que le han matado para que viva cantando todo lo que sentimos (...). Es el charanguito al que el diablo lo templa para que cante ch’untunquis y villancicos al Niñito Dios y es nuestro señor que se deleita escuchándolo entonar diabladas, malavidas y doctorcitos”.
Embajador
Han sido pocos los músicos que han logrado labrarse una carrera en la música tradicional boliviana y llevarla mucho más lejos de sus fronteras, uno de los pocos que lo consiguieron fue el cantautor y músico Ernesto Cavour.
Cavour fue toda una estrella, un símbolo para los amantes de la música, para los que disfrutan de los géneros andinos, ya que este guitarrista, compositor y cantante sí que consiguió llevar, a través de sus distintas formaciones, la música de su tierra a otros lugares, como Estados Unidos, Europa, México, Japón.
En ese contexto, en 2013, la Cancillería lo distinguió con el Cóndor de los Andes en el Grado de Caballero por considerarlo un artista sobresaliente con un recorrido musical en beneficio de la patria.
La carrera de Cavour comenzó en 1957 como solista, cuando tenía 17 años, y se extendió hasta 2006, cuando lanzó su último disco que recogió lo mejor de su producción musical. Sumó 50 discos en 50 años de vida artística.
Políticos destacan aporte de Cavour
Carlos Mesa
“Ernesto Cavour, un artista, una leyenda, él y el charango eran una sola entidad. Sus discos, con Alfredo Domínguez y Gilbert Favre, cambiaron el folklore boliviano. Mi más rendido homenaje en su partida”, escribió el expresidente.
Presidente Luis Arce
“El gran maestro del charango e ícono del folklore boliviano. Fue gracias a su ejemplo que aprendí a tocar el charango, siempre lo recordaremos. A su familia y seres queridos, nuestro sentido pésame”.
