Desconfianza y corrupción, males que dañan la democracia, según foro
En la primera jornada del Foro Político Multiactor que realiza la Unión Nacional de Instituciones para el Trabajo de Acción Social (Unitas), que reúne a más de 150 representantes de organizaciones de la sociedad civil, en la ponencia “Los poderes sin Estado” se identificó dos grandes males: la desconfianza de la sociedad hacia las instituciones estatales y la corrupción.
En esta exposición participaron el analista político y exsenador Carlos Borth, el exviceministro de Coordinación Gubernamental Freddy Bobaryn y el docente, sociólogo y comunicador social Rafael Loayza, oportunidad en que analizaron cuáles son los problemas y las causas que enfrenta la institucionalidad democrática en Bolivia, desde la perspectiva de la separación e independencia de poderes.
“En el marco de la democracia es necesario preservar las reglas del juego, y esto implica la independencia de los poderes: Aquí quiero traerles una visión realista no dogmática: no existe un país en el mundo en que la división de poderes sea absoluta”, mencionó Borth.
Asimismo, reflexionó sobre la situación del Órgano Electoral frente a los próximos comicios generales de 2025.
“Si la población no tiene confianza en el Órgano Electoral, que es el que materializa la constitución de los poderes públicos, entonces el poder público carece de legitimidad y credibilidad, eso es lo grave del Órgano Electoral”, sostuvo durante la ronda.
Justicia cuestionada
A su vez, Loayza hizo referencia a la debilidad del Estado que se ha profundizado en los últimos años como producto de la falta de confianza en la que está sometida la institucionalidad pública y que no depende únicamente de un cambio de autoridades, vocales u otro personal, sino de generar nuevos pactos sociales que permitan restituir la credibilidad.
“Una de las peores instituciones que tenemos en el país es el poder judicial. ¿Qué tanto hemos resuelto con las elecciones de jueces? Los mismos jueces que empezaron una cacería de brujas encarcelando a miembros del anterior régimen (MAS), esos mismos jueces encarcelaron a Jeanine Áñez cuando salió del poder. Claramente, esta institución requiere una reforma, con nuevas formas, personas y nuevos pactos que le devuelvan la institucionalidad”, manifestó Loayza.
Corrupción
Otro de los elementos que tocaron fue la corrupción, que se presenta particularmente como producto de la “falta de institucionalidad”.
Borth aseguró que ésta se refleja en la justicia y el Ministerio Público.
A su vez, Loayza refirió que la corrupción tiene mayor presencia en espacios donde “hay menos legitimidad de las reglas establecidas para la administración del Estado”.
Explicó que, si no se tiene la suficiente cantidad de recursos para hacer cumplir las reglas, “hay más probabilidad de que se imponga la corrupción”.
Falta política pública para defensores
El Foro Político Multiactor que este año lleva el nombre de “Ch’enko total: desenredando nudos, identificando rumbos”, en su primera jornada también tocó los temas de “pobreza multidimensional y desigualdad”, “protección y ejercicio de derechos y libertades fundamentales”.
Otro tema que se abordó fue la “importancia de una política pública de protección para defensores y defensoras de derechos humanos”.
Entre el 7 y 8 de noviembre de este año, se desarrolló el Encuentro Nacional de Defensores de Derechos, oportunidad en que se conformó el Comité Nacional para impulsar una política pública de protección para las personas y organizaciones que se abocan a la defensa de derechos en Bolivia.