Iglesia ve incertidumbre económica y pide nueva justicia y revisar la currícula
La Iglesia católica pidió ayer al Gobierno soluciones sinceras y despolitizadas para enfrentar la crisis económica, para revisar la malla curricular rechazada por el magisterio urbano y para garantizar la independencia judicial.
Los obispos emitieron un pronunciamiento en el marco de la CXII Asamblea de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB). En este advirtieron sobre las “sombras y oscuridades” que se deben afrontar “con fe, sinceridad y buena voluntad”.
También expresaron su preocupación por la “incertidumbre” en cuanto a la situación de la economía del país. “Tal es el caso de la incertidumbre que se cierne a nivel económico y que golpea con más fuerza a los más pobres. La situación económica en nuestro país precisa buscar soluciones sinceras y despolitizadas por el bien de todos”, señala en el documento leído por el secretario general de la CEB, Giovani Arana.
Además, los obispos hicieron un llamado a los gobernantes a trabajar “por una democracia auténtica” y pidieron asumir “con responsabilidad y seriedad el desafío que supone la crisis que atraviesa la Justicia” en el país.
“Existe en nuestra sociedad una urgente necesidad de encarar una profunda renovación de la Justicia, que haga que vuelva a su auténtico rol y servicio al ciudadano”, indicaron los obispos.
Además, la Iglesia ve la urgente necesidad de renovar el sistema judicial en Bolivia, “pero no con parches, más bien una renovación integral que contempla el cambio de todos los actores, porque de otra manera será más de lo mismo”, sostuvo el arzobispo Aurelio Pesoa, refiriéndose a las elecciones judiciales programadas para noviembre de este año.
Mencionó que la justicia debe ser para el bien común y proporcionada para todos y para todo nivel, “cuando la justicia se va distorsionando, las personas tienen derecho al reclamo”.
Señaló que la justicia no cumple a cabalidad el rol que le corresponde, porque la administración de justicia tiene intereses y la distorsiona.
La CEB también reiteró su “preocupación por la situación de la educación en Bolivia, que actualmente atraviesa una realidad conflictiva” por las protestas que realizan, desde hace varias semana, los sindicatos de maestros urbanos en rechazo al nuevo contenido educativo introducido este año por el Gobierno de Arce.
Los obispos volvieron a sumarse a los pedidos para revisar la nueva malla curricular, porque “denota una falta de participación, escucha y diálogo” con los sectores involucrados.
Territorios indígenas
Los obispos también se refirieron a los territorios indígenas en su comunicado: “Bajo esta iluminación, debiéramos entender que el cuidado de los pueblos y territorios indígenas es responsabilidad de todos. Hacemos un llamado a construir una cultura de paz, dejando de lado avasallamientos, intereses económicos y políticos, respetando la dignidad e identidad de nuestros hermanos indígenas cuyas características son el respeto, la sinceridad y la humildad”.