Los maestros urbanos retomarán movilizaciones a partir del 6 de junio
Los maestros urbanos del país determinaron reanudar sus movilizaciones desde el 6 de junio en demanda del ascenso de categoría y en contra de la jubilación forzosa, informó ayer la secretaria ejecutiva de la Federación del Magisterio Urbano de Cochabamba, Griselda Torres.
Además, comenzarán los contactos con otros sectores sociales para fortalecer sus protestas en torno a demandas comunes, como el rechazo a la jubilación obligatoria, la mejora salarial y en contra de la administración de la Gestora Pública, añadió Torres.
Los dirigentes de las 31 federaciones del país participaron en la IV Conferencia Nacional Extraordinaria el 24 y 25 de mayo en Aiquile, donde evaluaron las protestas en las calles del sector durante nueve semanas y articularon estrategias para reanudar las movilizaciones. “El magisterio urbano de Bolivia ha determinado ir a la segunda batalla”, sostuvo Torres.
El 6 de junio se llevará adelante una protesta simultánea en todo el país ratificando que el sector no tiene nada que celebrar.
Una de las resoluciones de la Conferencia fue el rechazo al tratamiento y materialización de cualquier proyecto de ley que pretenda jubilar de forma obligatoria a los trabajadores del país, puesto que la misma es un derecho y “debe ser voluntaria en el marco de los tratados internacionales, la Constitución Política del Estado y la Ley 065”.
Los maestros señalaron que algunos ya recibieron “invitaciones” para jubilarse.
Otra de las resoluciones hace referencia a la necesidad de convocar a un Congreso Educativo del Magisterio Urbano de Bolivia para elaborar una propuesta educativa que sirva de herramienta y lineamiento para encarar el Congreso Educativo Plurinacional; advirtieron que no permitirán que este evento sea un escenario político partidista.
Contra la COB
Además, censuraron la traición de los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB) “por dar la espalda y traicionar la demanda de mayor presupuesto económico para la educación del pueblo boliviano”.
La evaluación de las nueve semanas de protesta fue positiva y también incluida en las resoluciones de la Conferencia. “Hemos desnudado la crisis económica del país, así como la incapacidad del Gobierno para responder a las demandas de la educación de todo el pueblo boliviano, si bien los avances a nuestras demandas no son suficientes, ratificamos nuestro compromiso de lucha de seguir peleando por mejores conquistas”, señaló.