Capitán desoye la orden de coronel e incauta un camión con toneladas de precursores
"Ese camión debe seguir su curso", fue la orden que dio el jefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico de Santa Cruz Felcn, coronel Alex Bedoya, a un capitán cuando este le dio parte del descubrimiento de un vehículo que estaba cargado con casi cuatro toneladas de precursores químicos, sólidos y líquidos. Para sorpresa del alto jefe de la Felcn, el capitán le respondió que esa orden no podía cumplirla y como responsable de las patrullas procedió a la incautación del camión y la detención del conductor.
La historia de la operación
Según informes idénticos de los asignados al caso de las dos patrullas de la Felcn y del capitán que forman parte del expediente, todo empieza el martes 19 cuando se trasladan hasta la jurisdicción de Guarayos para verificar la información del posible funcionamiento de un laboratorio de cristalización de cocaína.
Los agentes solo encontraron algunas estructuras de maderas, pero ningún tipo de sustancias controladas, por lo que de inmediato regresaron a Santa Cruz de la Sierra.
El mismo día alrededor de las 11:00, entre Cuatro Cañadas y Pailón, los policías observaron un vehículo estacionado a un lado de la carretera. Se trataba del camión Volvo placa 1668-HRD, que estaba con una llanta delantera pinchada y un gomero tratando de arreglar. Tras una requisa inicial el conductor, identificado como David Costa Roca, mostró nerviosismo y se descubrió que trasladaba precursores químicos en estado sólido y líquido y no tenía ninguna clase de documentación.
Que el camión siga su curso
Los sendos informes señalan que por normas internas y conducto regular el capitán dio parte vía llamada telefónica del caso al jefe departamental de la Felcn coronel Alex Bedoya. “Inmediatamente, el capitán nos comunicó la orden que había recibido por parte del director departamental de la Felcn-Santa Cruz, la cual fue que el camión interceptado siga su curso y el capitán le respondió que no podía cumplir esa orden”, señala el informe del expediente que fue elevado a la Dirección Nacional de la Inspectoría del Comando General de la Policía. El camión fue trasladado a Santa Cruz, junto al chofer, David Costas, pero el llantero fue liberado.
En los informes se registra la relación de la incautación. El camión estaba cargado con 300 kilos de soda cáustica, 325 de cloruro de calcio, 1.975 kilos de meta bisulfito y 90 kilos de urea. Asimismo, se registra 2.400 litros de acetato de etilo, además de 1.656 kilos de ácido sulfúrico.
A la cárcel con su silencio
El fiscal antinarcóticos Osvaldo Vinicius imputó al chofer David Costas Roca por el delito de tráfico de sustancias controladas y pidió su detención en la cárcel.
La jueza cautelar Marianela Salazar escuchó los fundamentos de ambas partes. Dio la palabra al conductor, pero optó por el silencio, se limitó a decir que era simple conductor, no presentó papeles del cargamento ni reveló quién lo contrató y al final fue enviado a la cárcel.
El Deber trató de recoger la versión de la autoridad de la Felcn de Santa Cruz y a escala nacional pero no fue posible. La Felcn aún no ha informado sobre la operación.
