Independiente Petrolero: Jenny Montaño, la reina en un mundo gobernado por hombres
Jenny Montaño tiene escrito su nombre con letras de oro en la historia del fútbol profesional boliviano al convertirse en la primera campeona, después que bajo su mandato el club Independiente Petrolero logró el título del Torneo Único 2021.
Montaño es una mujer multifacética, ya que no sólo es la presidenta del club capitalino, sino es empresaria. Administra hace más de una década una empresa de catering, junto con su hermana, es concejala municipal en Sucre, es química farmacéutica de profesión, es madre de dos hijos y esposa de Manuel Grass, hermano de Juan Pablo Grass, goleador del cuadro albirrojo en los 90.
Para Montaño, la clave para la conquista del título fue que el equipo trabajó y avanzó paso a paso con humildad.
“El campeonato lo hemos logrado con mucho trabajo, responsabilidad y manejar al equipo con mucha humildad. Independiente siempre fue de menos a más, los jugadores siempre se mantuvieron humildes, ellos siempre han ido paso a paso, hasta el último minuto siempre mantuvimos la humildad”, destacó Montaño.
Otra clave para que en Independiente no existan conflictos en el camarín, es que Montaño supo manejar al equipo sin hacer promesas de premios por resultados por partido, sino fue un ofrecimiento por objetivo.
“En Independiente nunca hubo camarillas. Los jugadores han pedido lo correcto, ellos no han parado nunca por tema de sueldos, porque nosotros hemos cumplido a cabalidad, día que se decía se ha pagado el sueldo y vamos a continuar así”, aseguró la dirigente.
Reflexionó a sus similares de otros clubes sobre cómo acostumbran a algunos jugadores a casi extorsionarlos con la exigencia de premios por resultados en los partidos.
“En Independiente no se les hace propuestas de premios, porque creo que es obligación del jugador dar su mejor esfuerzo para que el equipo vaya adelante. No podemos manejarnos con ciertos caprichos de jugadores, creo que desde un principio se debe dejar clara esta situación. Si otros equipos están acostumbrados a premiar un empate o ganar, en casa o de visitante, pues que mal. Llamo a la reflexión a los dirigentes, porque es la obligación del jugador darse íntegro en la cancha y luchar por tener logros”, indicó Montaño.
En Independiente el único premio fue por objetivo. Es decir, se le ofreció un 23,5% del monto que entrega la Conmebol, motivo por el que mientras más alto se llegaría en la tabla, mayor sería el premio.
Montaño es consciente que el equipo debe reforzarse en busca de hacer historia en la Copa Libertadores, pero espera conformar uno que mantenga esa humildad que los caracterizó este año.
“Somos una familia muy bonita que formó Independiente en base a respeto, cordialidad. Vamos a seguir trabajando en ese plan, de que jugador que llegue tiene que hacerlo de manera humilde, por más que venga de un Bolívar, de un Always Ready. Esos jugadores deben saber diferenciar que el club Independiente es un equipo en el que lo primero que se ve es la humildad y que el querer ser el mejor jugador y mejor equipo se logra en base al trabajo y la responsabilidad”, manifestó Montaño.
SU VIDA LIGADA SIEMPRE AL FÚTBOL
Jenny Montaño estuvo ligada al fútbol y al club Independiente Petrolero desde niña, cuando acompañaba a su padre Abelardo Montaño a las canchas.
“Yo llevo al fútbol y al club Independiente en mi corazón, desde muy pequeña vibraba por estos colores, rojo y blanco. Ahora nos toca estar de dirigentes, estar a la cabeza del club, pensar y trabajar por el bien y mejora del club Independiente, el equipo de mis amores”, dijo.
NO HIPOTECARÁ LA ECONOMÍA DEL CLUB
“Vamos a trabajar para armar un equipo competitivo, que pueda salir a buscar buenos resultados fuera del país, pero no vamos a exagerar los costos de los sueldos”, dijo Montaño.
La titular del club capitalino asegura que se debe velar por “la estabilidad del equipo, porque económicamente tenemos un colchoncito, pero eso tenemos que cuidarlo. Vamos a negociar con los jugadores que realmente quieran trabajar en el plantel en busca de la gloria”.
“EMPEZAMOS A TRABAJAR A LAS 4 DE LA MAÑANA”
REDACCIÓN CENTRAL
“Cuando uno ama lo que hace, se saca tiempo de donde no hay. Nosotros nos levantamos cuatro de la mañana, ya estamos acostumbrados a ir al mercado temprano, hacemos nuestra planificación diaria”, explica Montaño, para graficar un poco de cómo cumple a cabalidad con todas sus obligaciones en cada una de sus facetas.
Asegura que su familia está acostumbrada al trabajo duro, ya que su mamá, Mirian Daza, les enseñó a trabajar desde muy pequeños.
También habló sobre su familia, ya que tiene dos hijos.
“La mejor bendición de Dios son mis hijos. Tengo una hija de 15 años y un pequeño de 7 años que son lo mejor que tengo”, señala.
Agradeció todo el apoyo brindado a su hermana Ivonne, su mano derecha en las empresas familiares.
“Mi hermana Ivonne Montaño es mi mano derecha, mis ojos. Le agradezco mucho a ella por todo su apoyo, ella es todo para mí”, aseguró.