Salvatierra sueña con ser el mejor jugador de fútbol de Bolivia
Por la cabeza del joven jugador Hugo Denar Salvatierra Saucedo sólo está el llegar a ser el mejor jugador boliviano, pasear su fútbol en los clubes grandes del país, ser convocado a la selección nacional y dar un salto a Europa.
A sus 17 años el volante ofensivo de Guabirá, que es uno de los cinco más jóvenes de la División Profesional, tiene decidido el camino a seguir, aunque primero quiere graduarse del colegio, algo que está a punto de lograr, puesto que está en la promoción.
También tiene en claro que la carrera del fútbol es corta, por lo que otro de sus objetivos de vida es a futuro estudiar para profesor de educación física, en la normal Rafael Chávez de su natal Portachuelo, y así seguir los pasos de sus padres, Denar Salvatierra y Marioly Saucedo, que son maestros.
Hugo vive con sus padres en Portachuelo, son los que lo mantienen, y en estos días de paralización del fútbol por la pandemia del nuevo coronavirus, está abocado a sus estudios para terminar la secundaria.
El jugador reconoció que le alegró la determinación del Gobierno de clausurar el año escolar, pero sigue pasando clases a distancia, no virtuales, en el colegio Carmen Oeste de Montero, al que debió cambiarse el año pasado para seguir con sus entrenamientos en el primer plantel de Guabirá.
“Huguito” como lo llaman sus compañeros de equipo debutó en el fútbol profesional a sus 16 años, en 2019, en el empate 0-0 contra Destroyers, en Santa Cruz, por la fecha 22 del torneo Clausura.
Fue el actual entrenador azucarero, Víctor Hugo “Copito” Andrada, quien le dio la oportunidad de estrenarse como profesional y luego le permitió jugar tres partidos más, en los que mostró toda su calidad futbolística.
El portachueleño se siente agradecido con el DT de las divisiones menores de Guabirá, el paraguayo Hugo Sosa, quien no dudó en invitarlo a pasar a filas azucareras.
No descuida su preparación
Durante la cuarentena por la pandemia de la Covid-19 Salvatierra, que es hincha confeso del Barcelona de España y admira a Lionel Messi y Andrés Iniesta, no descuidó su preparación, primero trabajó en grupo mediante el Zoom y ahora con las instrucciones que les envía el preparador físico Adrián Carrión.
El jugador, que sólo tiene una hermanita de seis años, cada tarde y mañana se traslada al estadio de su pueblo para trabajar en solitario en una de las canchas auxiliares, para evitar el contagio del coronavirus. Se exige al máximo con el objetivo de llegar en las mejores condiciones al reinicio de los entrenamientos de su club.